La primavera ha llegado más cálida que de costumbre al sector de las ‘telecos’ en los parqués de la vieja Europa. Los recurrentes rumores de fusión entre operadoras han vuelto a ganar fuerza en los últimos días y los inversores los cotizan al alza. Cuando muy pocos valores son capaces de permanecer ajenos a los altibajos del mercado, los inversores se inclinan por oportunas apuestas sobre este grupo de cotizadas.
Es Telecom Italia una de las que más está dando que hablar en los últimos días. La operadora italiana es una de las que más veces ha sido señalada por rumores de todo tipo como parte implicada en supuestos y múltiples contactos de fusión con terceros. Su última novia es la hongkonesa Hutchison Whampoa, que en el país transalpino opera a través de la marca 3Italia (H3G). La especulación ha sido tal en torno al pretendido movimiento corporativo que la firma europea ha llegado a apuntarse alzas de hasta el 8% en sesiones todavía recientes del parqué milanés, a la cabeza indiscutible de su índice de referencia.
Hace solo unos días, la ‘teleco’ europea ha reconocido conversaciones en esta línea. Una afirmación que no ha hecho sino abrir aún más el apetito de los inversores de perfil más oportunista. Sin embargo, no es la única en la que han sonado campanas de boda en los últimos días. Vodafone, otra de las operadoras más nombradas por analistas y especuladores como posible blanco de operaciones corporativas no ha permanecido ajena a esta oleada de rumores. En esta ocasión, los corrillos de la City londinense apostaban porque los operadores estadounidenses Verizon y AT&T podrían estar estudiando una oferta conjunta para expandir sus redes a esta orilla del Atlántico. Un movimiento que llegaría después de varias e intensas conversaciones entre compañías del sector en EEUU a lo largo del pasado año 2012, con muy dispares resultados.
Aunque en este caso los rumores se han desmentido, la fiebre de los inversores por buscar la posición adecuada y no dejar pasar el tren de una posible lluvia de millones en la firma de telefonía oportuna ha animado tanto el sector que hasta algunas compañías en principio ajenas a estos rumores, sacan partido del panorama. En este sentido, la gigante española Telefónica, a la que la sombra de las operaciones corporativas no se extiende según las quinielas de los expertos, sí que se ha ganado un puesto de honor en sus más recientes consejos de inversión, aupada por sus fundamentales y, especialmente a corto plazo, por estos rumores que calientan con fuerza el sector.
Ni siquiera Jazztel, eterna candidata de muchos oportunistas a la soñada operación corporativa entre ‘telecos’ del Viejo Continente se ha perdido esta euforia. Las presiones de la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) para que revenda parte de su red de fibra óptica que opera en un contrato de colaboración precisamente con Telefónica también calientan su gráfica de precios, amén de su reciente inclusión en el Ibex 35, cuya euforia ya comienza a corregir.
En lo que va de año, la presidida por César Alierta se apunta unos avances en Bolsa próximos al 9% y vuelve a moverse con holgura en las cercanías de los 11,00 euros por acción. La cifra da cuenta de su fortaleza en comparación con un Ibex 35 que no llega a remontar un 2% desde enero a esta parte. Una diferencia más que pone en evidencia el renovado apetito de los inversores por la compañía y el conjunto del sector.
