Amnistía Internacional denuncia «una constante» de detenciones «arbitrarias» en Cisjordania y Gaza

Cisjordania y Gaza

Amnistía Internacional denuncia «una constante» de detenciones «arbitrarias» en Cisjordania y Gaza

"En el marco de su respuesta a la propagación de la Covid-19, las autoridades palestinas, tanto en la Franja de Gaza como en Cisjordania, han violado el derecho a la libertad de expresión".

El paso de Rafá, en la frontera entre Egipto y la Franja de Gaza

Amnistía Internacional (AI) ha denunciado este jueves «una constante» de detenciones «arbitrarias» en Cisjordania y la Franja de Gaza de personas que han criticado a las autoridades, también respecto a la respuesta ofrecida ante la pandemia del coronavirus.

Así lo ha hecho mediante la publicación de una declaración, donde han pedido a las autoridades palestinas de Cisjordania y Gaza que «pongan fin a las violaciones del derecho a la libertad de expresión», además de «dejar en libertad de manera inmediata e incondicional a todas las personas detenidas sólo por expresar pacíficamente sus opiniones».

«En el marco de su respuesta a la propagación de la Covid-19, las autoridades palestinas, tanto en la Franja de Gaza como en Cisjordania, han violado el derecho a la libertad de expresión, deteniendo arbitrariamente a personas sólo por haber compartido de manera pacífica sus opiniones en las redes sociales», ha indicado el director adjunto de AI para Oriente Próximo y el Norte de África, Saleh Higazi. «Deben dejar inmediato de hacerlo», ha zanjado.

No obstante, Higazi ha reconocido que las autoridades palestinas «han tomado medidas positivas en zonas de los territorios palestinos ocupados donde tienen un control limitado, con el fin de poner en libertad a algunas personas presas».

En concreto, AI ha documentado cinco casos de personas a quienes las fuerzas de seguridad palestinas detuvieron en Cisjordania o la Franja de Gaza en marzo o abril, después de criticar a las autoridades en redes sociales o realizado otras actividades ‘online’.

La organización ha concluido que «fueron detenidas únicamente por el ejercicio pacífico de su derecho a la libertad de expresión». Según AI, todas fueron detenidas durante el estado de emergencia que las autoridades palestinas declararon a comienzos de marzo, tanto en la Franja de Gaza como en Cisjordania, para abordar la pandemia del coronavirus.

En uno de los casos, las críticas estaban relacionadas directamente con la respuesta de las autoridades a la crisis de la Covid-19, aunque AI ha precisado que en los demás no. «Algunas de las personas detenidas en este contexto han sido puestas ya en libertad, pero otras continúan bajo custodia», ha indicado la organización.

LOS CASOS

Amnistía Internacional ha hablado con personas que han estado detenidas, familiares de otras aún privadas de libertad, profesionales del derecho y organizaciones locales de Derechos Humanos y ha recopilado información que indica «claramente» la existencia de una «constante de violaciones» de Derechos Humanos.

El primer caso documentado por la organización corresponde a Hussam Khader, de 58 años y exmiembro del Parlamento por el Movimiento Nacional de Liberación de Palestina (Fatah).

Según AI, fue detenido por las Fuerzas Conjuntas de Seguridad el 5 de marzo en Cisjordania, como consecuencia de una publicación en Facebook del 1 de marzo en la que criticaba al presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, por un comentario que había hecho sobre la huelga que mantenía en ese momento el Colegio Médico palestino. Quedó en libertad el 9 de marzo, tras retirarse los cargos contra él.

Zakaria Khuwaylid, de 22 años, fue detenido en la ciuddad de Tulkarem por fuerzas de seguridad del Servicio de Inteligencia General de las autoridades palestinas por un comentario que había hecho en su página de Facebook criticando la respuesta de Abbas a la crisis de la Covid-19. Fue acusado formalmente de «difamación», pero quedó en libertad bajo fianza el 21 de abril.

Amnistía Internacional prosigue con el caso de Abdulá Abu Sharkh, escritor de 60 años, que fue detenido sin orden judicial por las fuerzas de Hamás el 13 marzo en el norte de la Franja de Gaza por una publicación de Facebook en la que insinuaba que el brazo militar de Hamás estaba implicado en un incendio que se había producido el 5 de marzo en una panadería del centro del territorio y en el que habían muerto 25 personas.

La Fiscalía lo acusó de «difundir noticia falsas» y de «hacer uso indebido de la tecnología» en aplicación del Código Penal de 1963. Quedó en libertad el 9 de abril, tras haber pasado 28 días bajo custodia. Según ha relatado, esta ha sido la sexta vez que es detenido por la administración de Hamás, ha trasladado AI.

Por su parte, Ismael el Bozom, caricaturista de Gaza de 33 años, fue detenido por la Policía sin orden judicial el 20 de marzo, tras haber compartido una publicación de Facebook donde se pedía la puesta en libertad de Abdulá Abu Sharkh. Quedó en libertad sin cargos el 22 de marzo.

Lo detuvieron de nuevo el 26 de marzo y lo dejaron libre el 29 de mismo mes, como medida preventiva contra la propagación del coronavirus. Ha explicado, ha recogido Amnistía Internacional, que las autoridades de Hamás lo han detenido cinco veces desde 2017 por sus viñetas y escritos de índole política, en los que critica a Hamás.

Por último, Rami Aman, de 38 años, continúa sometido a detención arbitraria por las fuerzas de seguridad de Hamás. Fue detenido el 9 de abril, tras haber organizado una videoconferencia con un grupo israelí días antes. Está todavía bajo investigación y no ha sido llevado ante un juez, según su abogado.

«Todas las personas detenidas únicamente por ejercer de manera pacífica su derecho a expresar sus opiniones son presos y presas de conciencia y deben ser puestas en libertad de inmediato y sin condiciones», ha insistido Higazi, que ha valorado que «el hecho de que las autoridades tomen medidas de este tipo durante una pandemia hace que esas personas corran mayor peligro aún».

«Las autoridades palestinas deben cumplir las obligaciones que han contraído en virtud del Derecho Internacional y garantizar que todas las respuestas a la Covid-19 están basadas en el derecho y las normas internacionales de Derechos Humanos», ha concluido.

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