El Movimiento Feminista de Madrid ha criticado el anteproyecto de Ley Orgánica de Garantía Integral de la Libertad Sexual no haya tenido en cuenta la prostitución ni la pornografía, que son «las mayores expresiones de violencia sexual».
«La prostitución es violar a mujeres previo pago», ha señalado este jueves 5 de marzo la filósofa feminista y escritora Victoria Sendón, durante la presentación del Manifiesto por los Derechos de las Mujeres del Movimiento Feminista de Madrid con motivo del 8M.
En este sentido, la experta ha subrayado que los prostíbulos sigan abiertos «es una violencia brutal, un esclavismo». «Eso se les ha pasado, no se les ha ocurrido que eso es violencia sexual», ha lamentado, en referencia a la nueva ley impulsada por el Ministerio de Igualdad.
Para Sendón, no tiene sentido que se haya hecho una Ley contra la violencia sexual, hablando «fundamentalmente de violaciones», que no tenga en cuenta la prostitución y la pornografía, que «son las mayores expresiones de violencia sexual».
«El PSOE ha gobernado muchísimos años y no ha hecho una ley antiprostitución. Menos blablabla y más hacer», ha sentenciado la activista, al tiempo que ha asegurado que la Ley de garantía del derecho a la libre expresión de la identidad sexual y/o de género, conocida como ‘Ley Trans’, que el Gobierno de coalición se ha comprometido a aprobar en su acuerdo, «es una aberración por muchas cuestiones».
«NO SÓLO EN CALLEJONES OSCUROS»
En la misma línea, la presidenta de Enclave Feminista, Sonia Lamas, ha exigido que la Ley de libertad sexual «se empape bien» de lo que es la violencia sexual. «No podemos quedarnos solo en que la violencia sexual se da en ámbitos donde hay alcohol y en callejones oscuros», ha defendido.
En concreto, ha afirmado que el 80 por ciento de la violencia sexual «no se produce en callejones oscuros ni en ambientes donde hay alcohol, sino en ámbitos más familiares»; y ha apostado porque las políticas feministas «tienen que ser transversales». «Las organizaciones expertas en movimientos feministas siempre vamos a estar disponibles para que cualquier Administración Pública nos escuche», ha manifestado.
En referencia a la ‘Ley Trans’, ha señalado que tienen que «seguir trabajando» y «seguir luchando» para que haya una «transparencia absoluta» de todo el marco legislativo. «No tenemos que llevarnos por conceptos rarunos que no están sustentados por teorías políticas. No nos tenemos que dejar de enredar y seguir trabajando contra cualquier tipo de violencia contra las mujeres», ha apuntado.
En este contexto, la representante del Partido Feminista Elena Rábade ha explicado que el problema con la ‘Ley Trans’ es que gays, lesbianas o transexuales «están invadiendo muchos derechos contra las mueres».
«Hay una desigualdad que perjudica a las mujeres, es necesario que cualquier ley de este tipo la examinemos y que den pie a que el movimiento feminista entre en ella. No es un problema contra los derechos de gays, lesbianas o transexuales», ha matizado.
Por su parte, la feminista Sandra Díez ha exigido una Ley abolicionista «para perseguir la explotación sexual» y ha afirmado que la trata con fines de explotación sexual «es una realidad». «Los puteros deben ser perseguidos y penalizados como lo que son, violadores», ha sentenciado.
Asimismo, ha subrayado que los «vientres de alquiler convierten a los bebés en productos» y que tienen a las mujeres «expuestas en un catálogo a disposición de los mejores postores».
MANIFIESTO POR EL 8M
El manifiesto presentado por el Movimiento Feminista de Madrid con motivo del 8M exige el fin de la violencia contra las mujeres porque «no hay paz». En este sentido, lamenta los asesinatos este «año negro» de 19 mujeres y una niña en España «por el terrorismo machista».
En este sentido, el documento critica que en las cifras oficiales, que cuentan 1.046 mujeres asesinadas por violencia de género desde 2003, «se esconde gran parte de la verdad», ya que «los feminicidios son casi el doble». «Las víctimas repuntan desde 2017. Toda la dimensión del terror de estos crímenes ha de ser tenida en cuenta», ha indicado las feministas.
El texto subraya que la violencia de género «no es sólo cuestión de Estado» sino que «es un grito global», ya que millones de mujeres en el mundo «impulsan una ola de indignación» contra estas agresiones.
«Demandamos que el reconocimiento a las familias de las víctimas se equipare al de otros terrorismos. No hay paz para nosotras cuando a la vez que honramos a las víctimas, se instala el negacionismo reaccionario: la extrema derecha ha declarado la guerra a las mujeres», ha exigido el Movimiento Feminista de Madrid en su manifiesto.
En el documento, las feministas también han resaltado que todas las violencias machistas «son expresiones de una misma ideología de odio»; la prostitución «debe ser reconocida como violencia machista»; la industria sexual «es hoy una multinacional del crimen»; España «necesita una Ley abolicionista de la prostitución»; o que el porno es la «pedagogía» de la violencia machista.
Igualmente, el manifiesto reivindican el derecho al aborto; que la explotación sexual y la reproductiva «comparten una profunda deshumanización»; alcanzar la independencia económica «que permita a todas una vida digna e imprescindible»; y que el reconocimiento del talento de las mujeres «también es hacer justicia».
