Se avecina conflicto en la Administración Pública. El sindicato CSIF ha amenazado con emprender “acciones legales” si el Ministerio de Política Territorial y Función Pública no rectifica su última medida “sorpresa”: limitar los días de asuntos propios de los empleados públicos y establecer un nuevo criterio.
La organización sindical ha denunciado que el departamento que dirige Meritxell Batet ahora ha establecido que estos días de asuntos propios están condicionados “al tiempo trabajado durante el año”. Según CSIF, esto supone “un importante recorte de derechos” al ser unos “criterios más restrictivos”.
“Es una interpretación cicatera ya que también se limitan de manera expresa, entre otros casos, los días de libre disposición de las mujeres víctimas de violencia de género que se reincorporen de una excedencia y los de las personas que se acojan a una excedencia por cuidado de familiares”, han reprochado desde CSIF.
De esta manera, se estaría pasando, según el sindicato, de contar con seis días de permiso por asuntos propios (más dos más al cumplir seis trienios en la Administración, más un día extra adicional por cada trienio cumplido a partir del octavo) a un nuevo criterio que determine la Administración.
Se estaría cambiando una norma que se redactó en 1983 cuando el entonces ministro de la Presidencia, Javier Moscoso, (de ahí el nombre de ‘moscosos’ que reciben estos días) decidió compensar de alguna manera la pérdida del poder adquisitivo de los funcionarios en aquella fecha.
Según ha recordado CSIF, estos días ya fueron reducidos en 2012 por la crisis económica, aunque poco después “fueron devuelto en reconocimiento por el esfuerzo realizado por los empleados públicos durante estos años de recortes”.
