Los banqueros de inversión de Deutsche Bank se preparan para un recorte de dos dígitos en los bonus de este año después de que la división del gigante bancario alemán registrase uno de sus peores años desde la crisis financiera, con las acciones en mínimos históricos.
El bonus de este año “se ve bastante horrible… está muy bajo”, señala un gerente senior del banco a Financial Times, aunque el proceso para determinar la cantidad final todavía no se ha finalizado. Otras fuentes consultadas por el diario británico apuntan a que en algunas áreas de negocio los recortes podrían ser de entre un 15% y un 20%.
El recorte de este año llega después de que el pasado ejercicio el banco realizase pagos de incentivos de 2.200 millones de euros, revirtiendo su movimiento para reducir los bonus el año anterior en más de un 80%, hasta una cifra de 500 millones de euros.
El banco informará los resultados preliminares de 2018 el 1 de febrero y divulgará su ‘pool’ de bonus definitivo el 22 de marzo, cuando publicará su informe anual. “El tamaño final del ‘pool’ aún puede cambiar en los próximos dos meses”, señala uno de los gerentes a FT.
El banco de inversión de Deutsche sufrió un 2018 muy complicado, perdiendo cuota de mercado frente a sus principales rivales y registrando una caída de un 15% en los ingresos en su crucial negocio de ‘trading’ en el tercer trimestre.
En mayo, en una medida drástica para controlar los costes, el nuevo CEO, Christian Sewing, eliminó uno de cada cuatro empleos en su negocio de venta de acciones y ‘trading’, que representa el 15% de los ingresos de la división. Deutsche recortó a 930 empleados de la oficina principal en el año hasta finales de septiembre, quedándose con 16.500 empleados en el banco de inversión. En general, el banco redujo la plantilla en 2.800 personas hasta una cifra de 94.800 trabajadores.
