Parece que la polémica persigue a Antonio Pulido, presidente de Cajasol, a pesar de que desde la absorción de Banca Cívica por parte de CaixaBank se había visto apartado a un segundo plano. El último ejemplo, la lujosa cesta navideña con la que ha agasajado a los consejeros de la caja andaluza.
Pulido habría mandado, según ha denunciado Facua, una cesta de Navidad a los consejeros y asambleistas de la entidad que contiene un jamón ibérico, una caña de lomo ibérico de bellota, un queso, un chorizo ibérico de bellota y un salchichón ibérico. El regalo vendría acompañado de una felicitación con su firma: “Con mis mejores deseos para el año 2013”.
Pulido se encuentra apartado actualmente de los grandes focos de la reestructuración del sector financiero. Tras el proceso de absorción de Banca Cívica, pasó a ser fugazmente consejero de CaixaBank, pero actualmente ocupa un puesto en Criteria CaixaHolding, otra sociedad dependiente de La Caixa.
Su labor no tiene tanta responsabilidad como se había barajado inicialmente, sino que se limita a tener bajo su control los activos inmobiliarios heredados de Banca Cívica, y sólo de Banca Cívica, que CaixaBank adquirió junto a la entidad, sin responsabilidad sobre el resto de activos de La Caixa.
