Ciudadanos defiende una reforma educativa y la ‘mochila austríaca’ para garantizar las pensiones

Pensiones

Ciudadanos defiende una reforma educativa y la ‘mochila austríaca’ para garantizar las pensiones

Antonio Roldán, portavoz de Economía de Ciudadanos

El portavoz de Economía de la formación naranja, Antonio Roldán, aboga por permitir la prolongación de la vida laboral más allá de la jubilación. El portavoz de Economía de Ciudadanos, Antonio Roldán, ha defendido esta mañana tres soluciones para garantizar el futuro de las pensiones: una reforma educativa, más flexibilidad laboral para poder trabajar más allá de la jubilación y la ‘mochila austriaca’.
 
Para Roldán, la clave está en la educación. Una reforma en este sentido permitiría a los españoles ser más productivos y con ello dar portazo a la precarización laboral, especialmente ante la amenaza de la “cuarta revolución”. En este sentido, ha destacado el alto abandono escolar y la ausencia de universidades españolas en los ranking de centros educativos más importantes.
 
“Hay que seguir formándose permanentemente”, ha señalado al respecto durante la jornada ‘El sistema público de las pensiones: aportaciones a un debate’, organizado por el diario Cinco Días, el portavoz de la formación naranja, que ha abogado también por reducir la dualidad de los contratos y la temporalidad.
 
Por otro lado, Roldán ha defendido que hay que avanzar en medidas para incentivar la prolongación de la vida laboral tras alcanzar la edad de jubilación en el caso de los trabajadores que así lo deseen para percibir mayores ingresos.

Finalmente, el portavoz de Economía de Ciudadanos ha resaltado la importancia de la “transparencia”. En su opinión, los ciudadanos deben saber lo que van a cobrar de pensión en futuro. En este sentido, ha apuntado hacia la denominada ‘mochila austríaca’.

Este mecanismo es un fondo de capitalización para trabajadores que se mantiene a lo largo de toda la vida laboral y que se puede hacer efectivo en caso de despido o de jubilación. La empresa provisiona cada año una parte del despido, aportándolo a un fondo individual de cada trabajador, que se incrementa con las rentabilidades logradas con la inversión del capital. En el caso de Austria, la cifra es de un 1,5% del salario bruto.

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