El portavoz de En Comú Podem cree que Iglesias “no valoró exactamente la trascendencia de que lo que decía y donde lo decía” y cree que no debió personalizar. El portavoz de En Comú Podem en el Congreso, Xavier Domènech, valoró hoy en RNE el hecho de que Pablo Iglesias arremetiera ayer contra los periodistas en una conferencia en la Complutense y la polémica que ha provocado el hecho de que personalizara sus críticas en periodista del diario El Mundo, Álvaro Carvajal.
Domènech lo primero que dejó claro es que, en su opinión, Pablo Iglesias no se lleva mal con la prensa y recalca que “hizo una reflexión y pidió disculpas posteriormente por cómo se desarrolló la reflexión” y reconoció que le sabe mal por Carvajal, al que calificó de “buen periodista” y recaló que no cree que “haya que personalizar” para después subrayar que “ayer la cosa fue polémica y Twitter quemaba”.
Y después dice que cree que a lo que se refería Iglesias es que el periodismo está en una situación de “cambio, mutación y crisis y hay una cierta ansiedad constante para sacar titulares” recalcando que piensa que “la competición por el mundo digital lleva a una cierta ansiedad para sacar titulares constantemente” con periodistas que tienen que subir el tuit, grabar y sacar la noticia a la vez.
La polémica que protagonizó ayer Pablo Iglesias con los periodistas monopolizó toda la entrevista y cuando le preguntan si cree que se equivocó Pablo Iglesias, Domènech responde que “igual no valoró exactamente la trascendencia de que lo que decía y donde lo decía”.
Finalmente y dadas las constantes referencias al enfrentamiento con la prensa, Domènech dijo que «fue un acto de libertad de expresión: una doble libertad de expresión» la de una persona que dijo lo que pensaba (Pablo Iglesias) y la de personas que protestaron y se marcharon al no estar de acuerdo con lo escuchado.
También le pidieron su opinión sobre la idea de que Podemos e IU concurran juntos a las generales a nivel nacional y el portavoz de En Comú Podem respondió que piensa que son positivos este tipo de pactos, aunque hace notar que quedan “pocos días, es poco tiempo” para que ambas formaciones negocien.
