La Comisión Europea responde así a las quejas de Reino Unido y dice que no hay pruebas de que el Gobierno español haya infringido las normas de la UE. España ha recibido el aval de la Comisión Europea para realizar controles fronterizos en Gibraltar. Bruselas ha respondido a las quejas emitidas por Reino Unido diciendo que no hay pruebas de que el Gobierno español haya infringido las normas de la Unión Europea (UE) al haber endurecido las inspecciones sobre personas y mercancías desde el pasado verano, tras el conflicto con las autoridades del Peñón por el lanzamiento de bloques de hormigón en la bahía de Algeciras.
El Ejecutivo comunitario ha remitido sendas cartas a las autoridades españolas y británicas para comunicarles su decisión. Bruselas envió una delegación a la zona para examinar la situación el pasado 25 de septiembre, pero no ha sido hasta ahora cuando ha dado a conocer sus conclusiones, en las que se incluye una serie de propuestas para mejorar las relaciones entre España y Gibraltar.
“Sobre la base de sus observaciones durante esta visita técnica y la información aportada por las dos autoridades, la Comisión no ha encontrado pruebas para concluir que los controles sobre personas y mercancías, tal como han sido practicados por las autoridades españolas en el paso fronterizo de La Línea de la Concepción, han infringido las disposiciones del derecho de la Unión en esta materia”, indica el informe de Bruselas.
Asimismo, la Comisión indica que “la gestión de este paso fronterizo, no obstante, constituye un reto, habida cuenta de los fuertes volúmenes del tráfico en un espacio relativamente reducido y el aumento de la introducción de tabaco de contrabando en España”. Por ello, el Ejecutivo comunitario considera que “las autoridades de ambos lados deberían tomar medidas ulteriores para hacer frente a estos retos” de mejor forma, y formula tres recomendaciones a ambos Estados.
En el caso de España, recoge Europa Press, Bruselas propone en primer lugar optimizar el espacio físico disponible en el lado español del puesto fronterizo para garantizar una mayor fluidez del tráfico. Y más concretamente, insta al Gobierno a revisar la organización del tráfico a la entrada y a la salida de España para aumentar el número de carriles de vehículos para viajeros o utilizar mejor las filas existentes.
Asimismo, le pide realizar controles más selectivos, basados en un depurado análisis del riesgo, para reducir el gran número de controles fronterizos aleatorios, así como desarrollar el intercambio de información con el Reino Unido sobre el contrabando de tabaco.
Por otro lado, en su carta al Reino Unido la Comisión pide que Gibraltar haga controles basados en un análisis del riesgo sobre los viajeros y sus pertenencias a la salida del Peñón por el paso fronterizo de La Línea de la Concepción. Y le recomienda optimizar la legislación y las salvaguardias con objeto de contribuir a una lucha eficaz contra el contrabando de tabaco, así como desarrollar el intercambio de información con España sobre el contrabando de este producto.
“La Comisión opina que pueden obtenerse resultados en la lucha contra el contrabando y la delincuencia transfronteriza, así como mantener la fluidez del tráfico, mediante la cooperación diaria entre las autoridades que trabajan en cada lado de la frontera”, señala el informe. Por ello, el Ejecutivo comunitario “anima a todas las autoridades pertinentes a reforzar el diálogo constructivo con sus homólogos a este respecto”.
Bruselas ha indicado además que seguirá supervisando la situación en el puesto fronterizo de La Línea de la Concepción y ha solicitado recibir, dentro de seis meses, información de ambas autoridades sobre cómo se han tenido en consideración las recomendaciones.
En esta misión a Gibraltar la Comisión Europea no abordó las cuestiones contra el fraude fiscal ni tampoco los problemas medioambientales por el lanzamiento de bloques de hormigón en la bahía de Algeciras, ya que estas cuestiones están siendo examinadas aparte por Bruselas a raíz de una queja formal presentada por España.
