Este martes fue Rodrigo Rato, hoy Pedro Solbes. El exministro de Economía de José Luis Rodríguez Zapatero ha comparecido en la Comisión de Investigación sobre la crisis financiera que está teniendo lugar en el Congreso. De sus palabras se desprende autocrítica (“nos equivocamos”) sobre su gestión y alguna que otra frase llamativa: “Las puertas giratorias existirán siempre y si no existen es una desgracia”.
Pedro Solbes admite que su trabajo al frente de la cartera de Economía entre el año 2004 y 2009 estuvo repleto de aciertos y errores. Una aseveración, esta última, llamativa, a tenor de la falta de autocrítica con la que han desfilado los anteriores comparecientes de esta comisión de investigación.
“Nos equivocamos totalmente en las previsiones macroeconómicas. No fuimos capaces de detectar la fuerte recesión española en 2009 y se pensaba volver a una situación de crecimiento en 2010. Esperábamos un aterrizaje suave de la burbuja, pero no fue así”, ha sido una de las frases que ha pronunciado Pedro Solbes antes las preguntas de los partidos políticos.
Solbes afirma que una política fiscal más restrictiva – que él defendía – hubiera podido reducir el impacto de la crisis. Sin embargo, sus advertencias no fueron atendidas por el Ejecutivo ni por la Patronal, desbordados por entonces por una economía superficialmente boyante.
“Mis críticas públicas sobre el exceso de viviendas iniciadas o lo inadecuado de las hipotecas a 40 años cayeron en saco roto. Era más importante mejorar la competitividad de los sectores. En definitiva, que la fiesta no terminara”, ha resumido el exministro, que ha recordado que se llegaron a construir 800.000 viviendas “y solo se necesitaban unas 400.000 o 450.000 por el ritmo de creación de hogares”.
Pedro Solbes, no obstante, considera que as soluciones “del pasado” no eran la solución. “¿Se podía haber prohibido construir viviendas? No creo que hubiera sido legal ni eficiente”, ha afirmado.
Por otro lado, el encargado de la Economía en España entre 2004 y 2009 asume que “se minusvaloró el riesgo de déficit por cuenta corriente por la existencia de un mercado único para el euro”.
En resumen, “no fuimos capaces de mejorar la situación corrigiendo su evolución; ni mi Gobierno ni el anterior […] asumo la culpa que tengo en la crisis; fui responsable de coger un tren que se aceleraba y se me aceleró más”, ha concluido antes de dejar una frase para recordar.
“Las puertas giratorias existirán siempre y si no existen es una desgracia que la política solo pueda contar con políticos profesionales que no puedan entrar y salir”. Eso ha afirmado el exministro que después pasó a ser consejero de la eléctrica italiana Enel y de Barclays.
