El personal laboral que trabaja en la Administración General del Estado en el Exterior (consulados, embajadas, así como el Instituto Cervantes o la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo) han dicho basta. Estos empleados públicos están convocados a una huelga mundial este lunes 16 de octubre en defensa de un salario digno. En concreto, reclaman un aumento como mínimo del 25% en sus nóminas.
Se trata, según los sindicatos, de la primera huelga mundial de la historia del servicio exterior. Con ella buscan reivindicar “sueldos justos”, ya que, tal y como explica CSIF, “la inflación mundial agregada durante los nueve años de congelación salarial ha superado ya el 25% de media”. De ahí que defiendan la necesidad de un aumento mínimo del 25% en sus nóminas, así como la apertura de una negociación para solucionar los casos más graves.
Ante esta situación, destaca CCOO, el Gobierno del PP ha hecho oidos sordos y “no ha dado ninguna respuesta”, lo que les ha obligado a convocar el mencionado parón de este lunes.
Además de las mencionadas reivindicaciones, la plantilla de las embajadas y consulados españoles exigen una negociación para solucionar el “caos salarial” y la política de sueldos mínimos que la Administración desarrolla en todo el Servicio Exterior y la “ordenación del caos de las Relaciones de Puestos de Trabajo con armonización de los sueldos por categorías y zonas geográficas”.
También se pide el “acatamiento inmediato” de las sentencias condenatorias de los distintos países “por incumplimiento de las normativas laborales de los países en que se presta servicio y el cumplimiento de la legalidad a través del respeto del Convenio de Viena, del Derecho Internacional”.
A esto hay que sumar, entre otras cosas, según los sindicatos, que se respete “la normativa de Seguridad Social Europea con sujeción incondicional a la legislación de Seguridad Social española para todo el personal laboral que presta servicio en países de la UE, así como el derecho de opción para el resto del colectivo”.