El alemán Sebastian Vettel logró hoy un buen golpe de efecto al conseguir la «pole position» en el Gran Premio de Singapur de Fórmula 1, donde su principal rival por el título, el británico Lewis Hamilton, sólo consiguió el quinto registro. En el circuito urbano de Marina Bay, Vettel logró un tiempo de 1:39,491 minutos y consiguió con su Ferrari finalizar por delante de los Red Bull del holandés Max Verstappen y el australiano Daniel Ricciardo, con más de tres décimas de ventaja sobre ambos.
De esa forma, el cuatro veces campeón del mundo, que celebró la clasificación casi como si se tratara de un Gran Premio, sumó la «pole» número 49 de su carrera y la cuarta en Singapur, donde ganó cuatro de las nueve carreras disputadas.
«El auto se sintió mucho mejor hoy de lo que lo sentí ayer», explicó el alemán, que golpeó el muro con un neumático trasero cuando intentaba su vuelta rápida. «Todavía estoy lleno de adrenalina, lo que diga no tiene mucho sentido», comentó exultante Vettel.
Más atrás quedó el finlandés Kimi Raikkonen, con la otra Ferrari, que terminó delante de los Mercedes de Lewis Hamilton y Valteri Bottas, que tal como se preveía, sufrieron con las trabadas curvas de la pista asiática.
«Fue una buena clasificación, no cometimos errores, pero no fuimos lo suficientemente rápidos», reconoció el tres veces campeón del mundo.
El español Fernando Alonso, con su McLaren, logró el octavo tiempo, justo detrás del Renault del alemán Nico Hülkenberg y delante de su compañero de equipo, el belga Stoffel Vandoorne. El español Carlos Sainz completó los diez primeros lugares con su Toro Rosso.
Con 13 carreras disputadas, Hamilton lidera las posiciones del Mundial con 238 puntos, tres más que Vettel.
