Las críticas que han ido creciendo en las últimas semanas dirigidas al consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Jesús Sánchez Martos, no ha cambiado los planes del propio protagonista. El popular ha reiterado, tras ver la manifestación que los sindicatos sanitarios han emprendido contra su gestión, que seguirá al frente de la Consejería de Sanidad al tener “el voto de confianza de la mejor presidenta que es Cristina Cifuentes”.
Sánchez Martos ha decidido contragolpear ante las voces y las acciones que están rodeando su gestión. De esta manera, el consejero de Cifuentes, tal y como hizo en la previa de la movilización, ha vuelto a tachar de “partidista” la concentración que se ha vivido este jueves en la Puerta del Sol. De hecho, pese a los mensajes lanzados por las organizaciones sindicales, el popular ha asegurado que no ve un hostigamiento contra su gestión.
Y es que el consejero de Sanidad ha mantenido que todo se trata de una maniobra “partidista totalmente interesada” que busca “una desestabilización”. Por ello, Sánchez Martos ha reafirmado su reto a los sindicatos: que “uno a uno digan al consejero frente a frente cada uno de los compromisos que no ha cumplido”.
No obstante, los representantes de los trabajadores ya han apuntado cuáles son algunos de esos incumplimientos y la no inclusión de la carrera profesional y la promoción profesional en las cuentas autonómicas, tal y como se prometió, fue lo que dinamitó la confianza. A pesar de la tensión, Sánchez Martos ha relatado, según ha recogido Europa Press, que no entiende estos mensajes ya que, por ejemplo, mantiene unas “relaciones buenísimas” con el secretario general de SATSE (organización hoy presente en la movilización) que se escenificaron el fin de semana pasado en un encuentro de enfermería.
De esta manera, el consejero de la Comunidad de Madrid ha avanzado que mañana acudirá a la Mesa Sectorial de Sanidad para que las organizaciones sindicales les informen de esos supuestos incumplimientos que él no ve. Unas reuniones a las que seguirá acudiendo porque la dimisión no está en su mente al tener el voto de Cifuentes que, a su entender, es el que cuenta: “¿Quién me ha nombrado? ¿Los sindicatos?”.
