La crisis del bipartidismo provoca la irrupción de numerosas formaciones que tratan de lograr un escaño en el Parlamento Europeo. El 25 de mayo los españoles están convocados a una nueva cita en las urnas. Esta vez, las elecciones al Parlamento Europeo. Unos comicios que tienen lugar en plena debacle de los partidos mayoritarios -PP y PSOE- que ven cómo, encuesta tras encuesta, los ciudadanos le dan la espalda a los proyectos de Mariano Rajoy y Alfredo Pérez Rubalcaba. La caída en picado de populares y socialistas ha provocado la irrupción de nuevas `estrellas’ en el panorama político.
Podemos, el Partido X, Vox, Recortes Cero o Movimiento RED son algunas de estas nuevas formaciones que van a tratar de probar suerte en la cita del 25 de mayo. El objetivo es el mismo para todos: lograr un escaño en el Parlamento Europeo desde el que hacerse oír.
Una meta que se han marcado ante la crisis en la que está inmersa el bipartidismo, que ha provocado que la mayoría de los sondeos den ‘alas’ a grupos tradicionalmente minoritarios que ven ahora cómo podrían doblar, triplicar, incluso, cuadruplicar sus últimos resultados. Para ello, estos nuevos partidos se están apoyando en caras conocidas que encabezan sus candidaturas a las europeas.
De esta manera, la lista de Podemos la lidera el politólogo y tertuliano Pablo Iglesias; la papeleta del Partido X, el informático Hervé Falciani la ‘papeleta’ del Partido X; mientras que el veterano Alejo Vidal-Quadras, reconocido dirigente del PP, hace lo propio con Vox.
Entre medias, nada menos que el juez que encarceló al expresidente de Caja Madrid, Elpidio José Silva, que será el ‘número uno’ de la candidatura de Movimiento RED y el actor Manuel Galiana y el pintor Antonio López, que forman parte del proyecto de Recortes Cero.
Todos estos buscarán hacerse un hueco en el Parlamento Europeo y sacar tajada de la mencionada debacle de la que pueden ser víctimas socialistas y populares. Y tratan de conseguirlo marcando distancias con los que algunos tildan como “los partidos del régimen”.
Así, reniegan de las subvenciones públicas para ‘vivir’ o se oponen tajantemente a pedir un crédito a entidades financieras, lo que provoca que estos partidos se vean abocados a pedir dinero a sus simpatizantes o afiliados para su campaña. Un ejemplo de estas prácticas sería Podemos.
La formación que lidera Pablo Iglesias no duda en lanzar una campaña de crowdfunding para realizar su spot electoral, una auditoría interna o el tradicional buzoneo que se lleva a cabo en estas citas electorales.
El protagonismo que están ganando estos nuevos ‘peces’ en el ‘mar’ de la política ya está provocando más de un recelo. Este sería el caso de Vox. En las filas del PP empieza a correr la tesis de que el proyecto de Vidal-Quadras puede ‘robar’ un buen número de votos a los populares, claves en unos comicios tan igualados y que suponen todo un examen a la gestión de Rajoy.
