El PSM carga contra la Consejería de Sanidad por no solucionar los problemas de “salubridad” que existen en los centros de salud más antiguos. La higiene de los centros de salud de la Comunidad de Madrid ha puesto de nuevo en un brete al Gobierno de Ignacio González. Tras lo ocurrido el pasado mes de septiembre, cuando los médicos denunciaron que con la privatización de la limpieza había ratas muertas o vómitos sin recoger durante horas en los ambulatorios, ahora el PSM ha dado una nueva voz de alarma tras encontrar cucarachas y problemas de ventilación en algunos consultorios del centro de la ciudad.
Concretamente, el partido que lidera Tomás Gómez ha exigido a la Consejería de Sanidad regional que solucione de una vez la situación “lamentable e insostenible” en la que se encuentran centros de salud como el Palma Norte, ubicado en la zona de San Bernardo, en pleno centro de Madrid. En este ambulatorio, dicen los socialistas, se ha encontrado “una lámpara llena de cucarachas”, lo que “demuestra las malas condiciones de salubridad” del consultorio.
Tal y como ha explicado el portavoz de Sanidad del PSM en la Asamblea de Madrid, José Manuel Freire, “es una vergüenza que se mantenga así desde hace tanto tiempo y a pesar de las múltiples y reiteradas protestas de vecinos, médicos y personal sanitario”. El socialista ha insistido en que “es un derecho de pacientes y profesionales que los servicios se den en condiciones dignas y éstas no son condiciones dignas”, por lo que ha exigido al Ejecutivo autonómico una solución inmediata.
El socialista ha indicado que este centro de salud está ubicado en un bajo, es de renta antigua y tiene malas condiciones de salubridad porque las salidas del aire acondicionado están mal puestas, las puertas abren hacia dentro y los despachos médicos no tienen ventanas. “Es una situación que la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid debe solucionar cuanto antes”, ha advertido Freire, que ha anunciado que el Grupo Socialista llevará el tema a la Asamblea y donde sea necesario “hasta que se resuelva”.
Los socialistas explican en una nota que la entrada al centro de salud “es única y no existe salida de emergencia, la puerta se abre hacia dentro y tiene unas dimensiones que hacen muy cuestionable el paso de una camilla de ambulancia”. Asimismo, “los problemas de espacio son muy importantes, ya que hay consultas donde el paso del profesional y el paciente son dificultosos y manejarse en su interior es muy difícil”, y además, “el almacén de material clínico tiene una puerta de acceso de 1,5 metros de alto y moverse en su interior no es nada fácil”.
