La dañada cubierta del Palau de les Arts de Valencia será retirada sin contar con la opinión del arquitecto. Una operación que costará tres millones de euros. La Generalitat ha decidido que la única solución para evitar los desprendimientos de la cubierta del Palau de les Arts de Valencia es retirarlo, a pesar de la intención del arquitecto de la obra, Santiago Calatrava, que se ha ofrecido para solucionar este problema.
De hecho, fue el propio Calatrava el que se puso en contacto con la Generalitat llegándose a pactar una reunión para los próximos días, en la que el arquitecto defenderá que se trata de un error constructivo y no de diseño de la obra.
La retirada de los 8.000 metros cuadrados de mosaico cerámico que recubren el edificio asciende a tres millones de euros. El peligro de colapso es tal que el gobierno catalán ha contratado ya unas obras de emergencia para quitar el ‘trencadís’ que se ha despegado de la bóveda de acero un 60%, según ha dicho el consejero de Economía, Industria y Empleo y presidente del Consejo de Administración de la Ciudad de las Artes y las Ciencias (CACSA), Máximo Buch.
Todo empezó tras caerse el pasado 26 de diciembre un trozo de ‘trencadís’ por el fuerte viento. El peligro de desprendimientos ya fue advertido por varios arquitectos cuando se detectaron los abombamientos o arrugas que atraviesan la fachada del Palau. «Es evidente que está en mal estado la parte del trencadís de la cubierta y que va a haber que solucionarlo con una acción de intervención de una empresa que lo desmonte», ha afirmado Buch.
