El Observatorio Madrileño de la Salud afirma que el consejero sólo está preocupado por “transferir dinero público a las empresas privadas”. Las medidas impulsadas por Javier Fernández-Lasquetty se han cobrado miles de puestos de trabajo. Según ha indicado el Observatorio Madrileño de la Salud, formado por sindicatos, asociaciones profesionales y entidades sociales, sólo en 2013 se perdieron 3.300 trabajadores públicos debido a los recortes del consejero de Sanidad, del que dicen que su único objetivo es “transferir dinero público a las empresas privadas”.
Tal y como indica este colectivo en el tercer informe que ha elaborado sobre el estado de la Sanidad en la Comunidad de Madrid, en sólo doce meses la política del Gobierno regional del PP ha profundizado en la “precarización y destrucción de empleo público”. El Observatorio indica en su informe que “la caída de empleo en el sector sanitario supone una disminución de casi el 10% del total” de empleados públicos con los que contaba la región a principios de 2013, unos 75.000, porque aparte de las medidas implantadas la Consejería “ni siquiera cumple la normativa estatal que establece que se han de reponer el 10% de las bajas y jubilaciones en los sectores públicos prioritarios”, como la Sanidad.
No obstante, lo más grave de todo para este colectivo es que en lo que llevamos de legislatura (empezó en mayo de 2011) y sólo contabilizando hasta julio de 2013, se han perdido un total de 5.452 trabajadores en los centros sanitarios públicos de la Comunidad de Madrid. Es más, el Observatorio afirma que “la repercusión sobre el empleo sería seguramente superior si se tuviera en cuenta que existe una gran cantidad de personal con contratos que no está contabilizada en plantilla”. En este caso, calculan que serían 7.000 los trabajadores afectados.
Por otro lado, respecto al copago, el Observatorio afirma que se ha producido una “disminución interanual del número de recetas” como consecuencia de esta medida. El año pasado se contabilizaron 12.823.269 menos, un 11,71%, debido a “la exclusión de medicamentos y la no retirada de recetas prescritas a los pensionistas con rentas bajas” que no pueden asumir los costes del copago.
Y también carga contra los ‘call center’ o centros de llamadas, a través de los cuales se derivaron a los centros privados, según indica el observatorio, un 67,4% de las pruebas diagnósticas y un 58,7% de las intervenciones quirúrgicas. El colectivo critica que estos centros “persiguen a los usuarios para cambiarles las citas en los centros públicos por otras en los privados” al tiempo que se “ha impedido la libre elección de centro evitando, con todo tipo de tretas, la elección de centros públicos”.
Asimismo, respecto a los Presupuestos sanitarios elaborados por la Comunidad de Madrid para 2014, el Observatorio afirma que un año más el Gobierno de Ignacio González “infrapresupuesta” esta partida, lo que impedirá hacer frente a los gastos sanitarios que se generen a lo largo del ejercicio y obligará a “hacer modificaciones al alza” a mitad de año.
Entre otras cosas, y tras analizar estas cuentas, los colectivos agrupados en el Observatorio afirman que “no se justifica muy bien el nuevo convenio del Centro de Transfusiones con Cruz Roja” sobre las extracciones de sangre porque este año se estima la recogida de 145.000 bolsas, cuando hace un año se cifró en 190.000.
También indican que “pese al aumento del presupuesto en los seis hospitales de gestión mixta cuya gestión el Gobierno regional quiere privatizar, lo cierto es que se mantienen intactas las actividades y objetivos con respecto al año anterior, por lo que la justificación de dicho aumento es cuanto menos dudosa”, pudiendo estar relacionada con un intento de aumentar los ingresos de las empresas privadas que han resultado adjudicatarias de los centros y que se mantienen a la espera de la decisión de la Justicia para entrar a gestionarlos.
En opinión del colectivo, “si comparamos los Presupuestos de 2013 y 2014 en materia sanitaria, podemos afirmar que fruto de la presión profesional, sindical, social y política el Gobierno regional no ha podido llevar a cabo su Plan de Sostenibilidad. Es decir, este plan ha sido un auténtico fracaso”.
El Observatorio concluye que “mientras que los Presupuestos de 2013 fueron los de la ‘revolución sanitaria’, los de 2014 no aportan nada nuevo que permita mejorar el sistema sanitario público de la Comunidad de Madrid y demuestran la falta de liderazgo e iniciativa del Ejecutivo autonómico que pueda ir más allá de la mera transferencia de dinero público a las empresas privadas”. El PP sigue “renunciando a gestionar desde lo público la Sanidad de todos los madrileños”.
