El portavoz socialista en el consistorio de Madrid quiere repetir como cabeza de lista ante los rumores que apuntan a Antonio Carmona como el elegido por el líder del PSM para este puesto. Alfredo Pérez Rubalcaba no quiere dejar Madrid y, en especial, el Ayuntamiento de la capital, en manos de Tomás Gómez. El secretario general del PSOE, según han asegurado fuentes socialistas, habría encargado a Jaime Lissavetzky, con el que mantiene una estrecha amistad, que comience a ‘vender’ su candidatura a las municipales de 2015 ante la intención del líder del PSM de tratar de colocar a uno de los ‘suyos’ al frente de la papeleta electoral. En concreto, Gómez estaría pensando en Antonio Carmona para intentar hacerse con la Alcaldía.
De esta manera, el actual portavoz del PSOE en el Ayuntamiento y exsecretario de Estado para el Deporte estaría recorriendo algunas agrupaciones socialistas para manifestar su intención de repetir candidatura.
Un ‘tour’ en el que, según dirigentes del partido con sede en la calle Ferraz, Lissavetzky sondea los apoyos que tendría para volver a presentarse como cabeza de lista del PSOE al consistorio de la capital, y con el que estaría respondiendo a Tomás Gómez y a sus intentos para ‘hacerse’ con la candidatura.
El líder del PSM quiere acabar con las injerencias de Ferraz y, en especial, de Rubalcaba, por lo que pretende que el ‘número uno’ de la papeleta socialista al ayuntamiento lleve su ‘marca’. En concreto, el que fuera alcalde de Parla estaría pensando en el profesor y diputado autonómico, Antonio Carmona.
El responsable de Economía de los socialistas de la región se ha hecho todo un habitual en los debates y tertulias televisivas y su nombre es conocido por amplios sectores ciudadanos. Una popularidad que evitaría a Gómez tener que lanzar una campaña electoral desde cero.
La elección del candidato del PSOE al Ayuntamiento de Madrid no es un asunto baladí para los socialistas. Además de tratarse de la capital del Estado, con todo lo que conlleva, los comicios de 2015 llegan en uno de los peores momentos para el PP, con una Ana Botella sin crédito alguno debido a escándalos como el Madrid Arena o el fracaso de la candidatura olímpica. Asimismo, servirá para medir, una vez más, las fuerzas de Rubalcaba y de Gómez.
No obstante, Lissavetzky y Carmona no son los únicos que quieren auparse con la candidatura municipal. En esta pelea hay un tercero en discordia: el sociólogo y militante Enrique del Olmo, que en las últimas semanas ha manifestado su intención de liderar la papeleta socialista y presentarse a unas primarias.
