Sonia López Arribas, presidenta del ICOMEM, está a la ‘gresca’ con el resto de la Junta Directiva. Los colegiados creen que la situación es “insostenible” y que hace falta un “revulsivo”. La complicada situación por la que atraviesa el Colegio de Médicos de Madrid (ICOMEM), cuya presidenta, Sonia López Arribas, se ha quedado sin apoyos y está a la ‘gresca’ con el resto de miembros de la Junta Directiva, podría solucionarse dentro de poco. Los problemas de la institución que aglutina a 38.000 facultativos madrileños ya están en manos de la Organización Médica Colegial, que tendrá que decidir cómo poner fin a esta situación. Los médicos creen que hace falta un “revulsivo” porque la situación es “insostenible”, y aseguran que sólo se conseguirá de dos formas: o bien se adelantan las elecciones o se nombra una nueva directiva.
Así lo han indicado diversas fuentes médicas consultadas por elboletin.com. Tras hablar de la “mala imagen” que está dando la institución colegial, que con estas disputas internas refleja la “débil posición” que tiene ante la Administración en un momento en el que debería mostrar en bloque su rechazo a políticas tan controvertidas como la privatización de la gestión de seis hospitales, estas fuentes se han mostrado partidarias de dar un giro a la situación para acabar con la “desafección” y mostrar de una vez por todas “un colegio fuerte y representativo”.
Y es que la situación se ha ido complicando en los últimos meses. Tras la elección de López Arribas en las elecciones de mayo de 2012 los escándalos en la institución se han multiplicado. Primero hubo diversas dimisiones en el seno de la Junta Directiva, y la situación ha llegado a ser tan insostenible que ya ninguno de los miembros de la cúpula del Colegio apoya a la presidenta.
López Arribas y los ocho miembros restantes de la Junta se han denunciado mutuamente ante la Organización Médica Colegial (OMC), el órgano que agrupa a todos los colegios de España, que tendrá que dar una solución al conflicto. La presidenta lleva meses ‘anclada’ a su cargo a pesar de las constantes acusaciones de corrupción y de no contar con ningún apoyo, y no hay visos de que vaya a dimitir, por lo que los médicos exigen que se ponga “un poco de orden”.
La situación colea desde hace tiempo en los medios especializados, lo que ha provocado que incluso varios colegiados, según informa El País, hayan escrito también a la OMC pidiendo una pronta solución, ya que creen que el ICOMEM no les representa. Es más, el hecho de que los problemas hayan traspasado a la Junta y afecten también al normal funcionamiento del Colegio preocupa a los médicos, a pesar de que el alejamiento entre la institución y los facultativos es cada vez más grande (sólo hay que recordar las pasadas elecciones, en las que votaron 5.000 de los 38.000 colegiados).
La preocupación es la nota predominante, y así queda patente incluso en las redes sociales, donde diversos profesionales se han hecho eco de esta situación. Uno de los más críticos ha sido Julián Ezquerra, secretario general de la Asociación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid (Amyts), quien a través de su cuenta personal en Twitter ha mostrado su desacuerdo con la directiva y sus deseos de que haya un verdadero cambio en el ICOMEM.
“Los médicos necesitamos aclaraciones. No merecemos ser una mala noticia en prensa”, escribía hoy mismo, un mensaje que se une a los publicados a lo largo de la semana pasada y durante todo el mes de noviembre. “Necesitamos conocer que pasa en ICOMEM” porque la situación es “penosa”, ha señalado Ezquerra, quien aboga por aplicar “medidas urgentes por el bien de todos”.
Asimismo, hace unas semanas, tras señalar que el hecho de que “el ICOMEM sea portada de noticias indica que tenemos un serio problema” y hacen falta “respuestas”, el máximo responsable de Amyts pedía “un nuevo Colegio” porque “el ICOMEM está como las calles de Madrid, lleno de basura” -en referencia a la huelga de limpieza que vivió la ciudad a principios del mes de noviembre-.
