El plan de Sanidad de convertir los ambulatorios en pequeñas empresas autogestionadas por los profesionales ha empezado a ponerse en marcha. Fuentes de la Marea Blanca consultadas por ElBoletin.com aseguran que en algunos centros de salud de Madrid se estarían dando ya los primeros pasos para crear sociedades limitadas, nutridas por los médicos y el resto de los profesionales que trabajan en ellos, que se harían cargo de la gestión de estos ambulatorios.
Esta sería de hecho el inicio de la segunda fase de un plan pactado en julio con algunos sindicatos médicos, denominado “Pacto por la Sostenibilidad y la Calidad del Sistema Nacional de Salud” que ha causado mucha polémica en el sector.
El esquema permite a estos profesionales, actualmente funcionarios, pedir la excedencia y constituir sociedades limitadas que intentarán hacer rentables por medio del ‘ahorro’ y que no excluirían la posible entrada posterior en el negocio de las grandes empresas sanitarias privadas, según explica en un reciente comunicado la Coordinadora Antiprivatización de la Sanidad Pública (Cas).
La excusa sería, una vez más, la necesidad de ‘reconvertir’ el sistema para convertirlo en sostenible. Y se basaría en introducir la ‘gestión clínica’, incluso en los centros de salud, las unidades mínimas del sistema, con intención de prepararlos para un futuro entorno de competencia.
Con esta organización autónoma se abre la puerta, según la Cas, a las reducciones de plantilla, el recorte de prestaciones y una posible caída en la calidad del servicio que se presta a los pacientes, como fórmula para conseguir beneficios, lo que supondría también “vincular las actividades del personal médico y sanitario a un sistema de incentivos ligados al ahorro, sin control de calidad alguno y, con toda seguridad, similares a los que han puesto en marcha las empresas cuando gestionan la sanidad”.
