“Desde el Gobierno no podemos entrar a valorar las decisiones de los partidos como empresa”. Esta ha sido la respuesta que ha dado la vicepresidenta y portavoz del Ejecutivo, Soraya Sáenz de Santamaría, a las preguntas sobre la polémica desatada por la decisión del PP de eliminar los discos duros de los ordenadores que Luis Bárcenas tenía en Génova.
El ‘caso Bárcenas’ estuvo presente en el último Consejo de Ministros celebrado hace unas semanas y lo ha vuelto a estar en su primera reunión tras las vacaciones de verano. Sáenz de Santamaría ha tenido que responder varias cuestiones sobre los portátiles del extesorero, sobre todo, a tenor de que hoy nadie del PP ha salido a dar la cara al respecto.
Y lo ha hecho, escudándose en que el Partido Popular es una empresa y el Gobierno no habla sobre estos temas.
“Desde el Gobierno no podemos entrar a valorar las decisiones de los partidos como empresa”, ha afirmado la vicepresidenta en varias ocasiones. Lo que no ha dicho es que el PP es el partido que sustenta al Ejecutivo y que ella misma es un alto cargo de esta formación política.
Asimismo, ha remarcado que estamos ante un procedimiento judicial que el Ejecutivo “respeta” y “no valora”.
