Teresa Rodríguez y Echenique promueven la descentralización de Podemos

Nuevo debate en Podemos

Teresa Rodríguez y Echenique promueven la descentralización de Podemos

Tesresa Rodríguez, secretaria general de Podemos en Andalucía

Los líderes de Andalucía y Aragón apuestan por la plurinacionalidad del país y del propio partido. Podemos vive en una contradicción constante sobre el concepto de plurinacionalidad y el derecho a decidir de los territorios, ya que mientras apuesta por estas fórmulas como mejor encaje de las diferentes sensibilidades del Estado, el órgano de dirección del partido funciona centralizado en el ‘clan de la Complutense’. Aunque la incorporación de Pablo Echenique a la secretaría de organización de Podemos ha reducido en parte la endogamia universitaria.
 
En cualquier caso, esa visión plurinacional del país al mismo tiempo que Pablo Iglesias decide en gran parte las políticas territoriales y de pactos del partido ha acabado por agotar la paciencia de varios líderes territoriales, que han pasado a la acción para descentralizar Podemos.
 
El caso de Cataluña y los comunes fue el primero en tomar un carácter diferenciado. La situación política de Cataluña y la popularidad-aceptación de Ada Colau en el territorio derivó en una cesión paulatina de soberanía. El partido no podía permitirse el lujo de ordenar sobre la alcaldesa de Barcelona, uno de los activos más valiosos de la formación.
 
En Galicia se observó en las pasadas elecciones los problemas que tuvo inicialmente Podemos para articular un mensaje propio, hasta que tras mucho negociar y ceder, la dirección nacional del partido impuso a la regional la confluencia de En Marea.
 
Ahora son Andalucía y Aragón quienes han tomado la palabra, y a través de sus líderes regionales, Teresa Rodríguez y Pablo Echenique respectivamente, se intuye un nuevo debate dentro de la formación, que a comienzos de 2017 celebrará un nuevo congreso estatal en Vistalegre. Al de la ‘rigidez’ y la ‘transversalidad’ se unirá el debate sobre la ‘centralización’ o ‘descentralización’ del partido, tal y como ha admitido la portavoz adjunta del partido, Irene Montero. Si bien en este último caso el cuórum es mayor.
 
Rodríguez, reelegida como coordinadora general de Podemos Andalucía, asegura que la organización que lidera se constituirá como “una organización autónoma dentro de Podemos para decir que somos una nacionalidad autónoma y que necesitamos cotas de autogobierno, de autonomía y soberanía para poder sobreponernos a la situación de periferia, de subdesarrollo histórico y de dependencia en Andalucía en el contexto europeo y mundial”.
 
La líder andaluza considera que Andalucía tiene “unos rasgos y características propias que la diferencian del resto de pueblos de España”, por lo que Podemos debe convertirse poco a poco “en una organización confederal, descentralizada y donde los territorios cuenten. Con muchas caras, acentos, colores y discursos”.
 
En ese sentido, Teresa Rodríguez, ha informado a la dirección estatal del partido que la organización andaluza se constituirá formalmente como “una organización autónoma, que tenga estatutos, CIF y censo propios”.
 
Una línea parecida a la expuesta por Pablo Echenique, el secretario general de Podemos en Aragón. Echenique asegura que la organización que lidera debe pensar en Aragón en clave de país y crear un foro constituyente que se sume a los procesos que están en marcha en distintos territorios, como Andalucía. “Somos conscientes de que en un futuro cercano Podemos se encaminará a un reconocimiento del papel de los territorios en la organización, a que la noción de “País de Países” permee al modelo de Podemos”, afirma el líder aragonés, que considera que “Aragón se ha forjado una conciencia de país, pequeño país, luchando por una futuro digno y una democracia en la que sus deseos tuvieran espacio”.
 
En la dirección nacional del partido entienden que este proceso de descentralización del partido sucedería más pronto que tarde, y no parecen estar en disposición de plantar mucha cara al modelo planteado por Rodríguez, Echenique o Colau. En cualquier caso, si lo hiciera, la ‘casualidad’ volvería a mostrar en el Congreso de Vistalegre a Echenique y Rodríguez al frente de una posición opositora a la dirección.

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