Un repaso a la historia de cada uno de los candidatos a lehendakari. Iñigo Urkullu (PNV)
El candidato del PNV es el único que repite. Esa es en sí la metáfora que mejor resume lo que ha pasado en Euskadi, y en España, durante los últimos cuatro años. Gobernar desgasta a todos menos al PNV, que lejos de ver reducido su poder, amenaza incluso con incrementarlo. La incógnita está en saber si la suma de Elkarrekin Podemos y EH Bildu podría superar la conformada por los nacionalistas y el PSE. Si fuera el caso, Alfonso Alonso, calienta.
Iñigo Urkullu (Alonsotegi, 1961) es un líder que se ha ganado el afecto de un espectro muy amplio de la sociedad vasca. Según el CIS, Urkullu es el candidato predilecto para aquellos votantes que oscilan entre el 3 y el 10 en una escala donde 0 es extrema izquierda y 10 extrema derecha. Tanta es su penetración que en estas últimas semanas se está constatando que los indecisos dudan entre PNV y Podemos, y que los votantes del PP están abandonando a Alfonso Alonso para votar al actual lehendakari. Los populares consideran que la moderación, la seriedad y la religiosidad de Urkullu son el mejor cortafuegos para las aventuras ‘nacionalbolivarianopopulistas’.
El candidato del PNV, apasionado al trekking, que no es lo mismo que andar rápido, es un político que con 22 años ya realizó su primer discurso como miembro del PNV. Tiene tres hijos y una fe religiosa muy elevada. Su campaña sosegada y sin aspavientos – podría haberla llamado directamente ‘no somos Cataluña’ – conjuga con su forma de ser. No olviden que se trata de una persona que brinda, exclusivamente, con agua.
Maddalen Iriarte (EH Bildu)
EH Bildu aún no ha confirmado quién sería su candidata en caso de que presentaran una en la sesión de investidura a lehendakari. La inhabilitación de Otegi no les ha dejado fuera de juego, pero tampoco han hecho gran cosa por solventar esta cuestión. La periodista Maddalen Iriarte (San Sebastián, 1963)es quien ha sustituido a Otegi en la ‘pole position’ de Guipúzcoa, y para nada es descartable que sea la ‘jefa’ de un partido que busca un tripartito entre las fuerzas previsiblemente más votadas: PNV, EH Bildu y Podemos. Una ‘gran coalición’ a la vasca.
No es una quimera como tal, pero no anda lejos de serlo. Al PNV le interesa mantener su posición central, que no tiene por qué ser centrada, y a EH Bildu le interesa más mover el árbol. La rebeldía está en su ADN y buscará en Podemos el apoyo para construir una Euskadi más “justa y social”. Su anhelo es la independencia (¡sorpresa!), y establecerá fórmulas con las que intente acercarse a ella. Es probable que se encuentre solo en ese camino.
En cuanto a Maddalen Iriarte, es como si en España se presentara la periodista de TVE Ana Blanco como candidata de un partido político. Presentadora durante años del telediario de EITB, Iriarte ha ostentado el récord de Guipúzcoa de 100 y 200 metros lisos. Es madre de cinco hijos y lleva una vida luchando por la igualdad de las mujeres.
Idoia Mendia (PSE)
El Partido Socialista de Euskadi se enfrenta a unas nuevas elecciones, y tiene toda la pinta de que no les apetece mucho. Sobre todo si repasan su pasado reciente. Hace cinco años, por ejemplo, Patxi López era lehendakari y los socialistas contaban con 25 escaños. Hoy, las encuestas más benevolentes les otorgan 9 escaños. Dos tercios de sus votantes se han marchado y parece difícil que vuelvan a casa. Tienen más de 18 años, y quieren ver mundo. Idoia Mendia (Bilbao, 1965) es la candidata, y con el guirigay que tienen en el partido, bastante hace con ponerle ganas.
No es fácil hacer una campaña electoral con semejante contexto interno, y que a la postre tanto influye en el externo. Los periodistas están más atentos a si Mendia es afín (o no) a Sánchez que a las medidas propuestas. En parte porque una campaña enfocada a criticar al partido – PNV – con quien gobiernas en ayuntamientos y en diputaciones no resulta del todo creíble para la ciudadanía. Y la otra parte porque, como los demás partidos, anhelan con poco disimulo gobernar junto al PNV.
Idoia Mendia tiene dos hijos, uno de ellos conocido como ‘el niño de los presupuestos’. Un mote no muy lejano al que ponen a los niños cantaores. El parto de su segundo hijo le impidió asistir al pleno del Parlamento Vasco en el que se aprobaban los presupuestos del Gobierno para 2004 lo que, unida a la ausencia de Jaime Mayor Oreja y el huido Josu Urrutikoetxea, permitió al entonces lehendakari Ibarretxe aprobar contra pronóstico las cuentas. Es la primera mujer que encabeza al PSE en su historia y fue alumna de Xabier Arzallus.
Ah, lo olvidaba. Es muy afín a Sánchez.
Alfonso Alonso (PP)
Al Partido Popular le sucede en Euskadi algo parecido que al Partido Socialista. Va encaminado con decisión a protagonizar los márgenes residuales. En estos momentos sería visto como un éxito, bastante relativo, superar los 8 escaños. 8 escaños en un parlamento de 75. Es decir, la suma entre PSE y PP es probable que no supere a EH Bildu. Mientras el PP siga sin dar opción a políticos como Borja Sémper y forzando la dimisión de personas como Arantza Quiroga para poner de candidato a Alfonso Alonso (Vitoria, 1967), es probable que no consiga evitar el descalabro. Incluso es bastante más probable que le sea totalmente indiferente.
Precisamente es esa indiferencia la que está provocando una espantada masiva de votantes del PP hacia el PNV, que ven en Iñigo Urkullu como un hombre de bien. “Iñigo, acógenos, por favor”. El votante del PP vasco se encuentra desconcertado, sin referentes, sin discurso, y la intervención de Alfonso Alonso en el debate de EITB, en vez de paliar la inseguridad, la aumentó. Si el barco se hunde, el capitán debería ser el último en salir. Así que dice estar encantado con su nueva misión. Que es liderar, posiblemente, al quinto partido de la cámara vasca.
Alfonso Alonso tiene cuatro hijos y tiene en el historial el haber sido alcalde de Vitoria durante 8 años. De 1999 a 2007 fue la principal figura política de la capital vasca, dejando en su haber sentimientos agrios y dulces. No obstante, el caso San Antonio ha debilitado un tanto su legado. En mayo de 2016 fue condenado junto con Javier Maroto, por el Tribunal de Cuentas, a pagar 393.000 euros por los perjuicios ocasionados en los fondos públicos como consecuencia del alquiler de un local por encima del precio de mercado durante la etapa en la fue alcalde de Vitoria
Pili Zabala (Elkarrekin Podemos)
Elkarrekin Podemos ha llevado una campaña donde por mucho que uno pusiera la oreja era difícil encontrar propuestas concretas. O ni siquiera propuestas. Uno acaba la campaña electoral con la sensación de que la gente votará a Podemos para que decida la gente. Ese ha sido, más o menos, el late motiv de la confluencia de izquierdas, que ha evitado tomar posición en muchas cuestiones donde la ‘no posición’ lleva a la sospecha. Se sabe que Podemos defiende el derecho a decidir, el autogobierno y la justicia social. Pero no han conseguido transmitir muchas más ideas, a pesar de que si abres el programa electoral, tienen para tres legislaturas.
La ‘batalla’ – epistemología – interna de Podemos no ha afectado en demasía en una campaña que comenzaban con la idea de polarizar con el PNV, pero que en absoluto casaba con el carácter de la candidata, Pili Zabala. Podemos ha buscado en Euskadi un estilo ‘Carmena’, una candidata independiente, tranquila, sin inquinas y aglutinadora. Esa era su idea, y no iba mal encaminada. Salvo por la cuestión de que Iñigo Urkullu no se parece mucho a Esperanza Aguirre. Brinda con agua, recordad. El momento que protagonizó junto a Alfonso Alonso en el debate de EITB quedará para la posteridad, y gracias a ese momento podrá decir: “Mira nietos, y ahí es donde amama consiguió recuperar todo lo que había perdido en su campaña naïf”. Cuando Zabala sea abuela se hablará así. Si es que se sigue hablando con la boca y no por el móvil.
Pili Zabala (Tolosa, 1968), apasionada por el running, es madre de una niña y un niño. Licenciada en odontología, un accidente de tráfico le cortó la carrera. Abrió su clínica y durante años ha sido reconocida como una luchadora y activista en favor de los derechos humanos. Hermana de Joxi Zabala, asesinado por los GAL junto a José Antonio Lasa, procura no sacar a relucir el tema. Aunque en ocasiones, como en el debate, resulte inevitable.
Ah, lo olvidaba. Podemos Euskadi es más afín a la línea ideológica de Iñigo Errejón. Lo de hacer una campaña “amable” es marca registrada.
