La dirección de ADIF no vetó a las empresas fantasma de la trama del AVE Murcia-Alicante. La Guardia Civil, la Agencia Tributaria y el Servicio de Aduanas aseguran que ADIF siguió contratando con la trama del AVE en el tramo Murcia-Alicante a pesar de saber que los costes de las obras estaban sobrevalorados. En los informes a los que ha tenido acceso la cadena SER se establece que era Jose Luis Martínez Pombo, jefe de infraestructuras de ADIF en la Línea Madrid-Levante, quien suscribía los documentos fundamentales “tanto para el inicio de las obras como para que estas pudieran ser abonadas por ADIF a las adjudicatarias principales”.
Según apunta la emisora, investigadores de la dirección de ADIF sospecharon de los altos precios y decidió cotejar antes los precios contratando una asesoría externa con la empresa TRAGSA. Esta empresa debería corroborar los planes y el gasto aproximado que tendrían llevarlos a cabo. Pues bien, según los atestados de TRAGSA “las soluciones propuestas y las tarifas de TRAGSA eran sensiblemente inferiores a los presupuestos que finalmente fueron aceptados y aprobados por ADIF”.
En el informe de la Guardia Civil y de la Agencia Tributaria al que ha accedido la cadena SER se detalla cómo el experto en desarrollo de negocio de TRAGSA, Ildefonso Mere Medina, asegura que la dirección de ADIF estaba al corriente del desfase económico: “las soluciones propuestas de ADIF estaban sobrevaloradas en millones de euros y ADIF tuvo constancia”, afirma. Por otro lado, en el mismo informe el gerente de la zona de la delegación de TRAGSA en Alicante, Alejandro Manuel Cerdan, reconoce también que “las diferencias en el presupuesto entre las soluciones propuestas por ADIF y las de TRAGSA son importantes”.
El resultado de la evaluación cuantificaba que el sobrecoste en algunos tramos de obra ascendió a los seis millones de euros.
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