Ximo Puig y Emiliano García-Page piden paciencia sobre la respuesta final que dé el PSOE: “Cuando llegue el futuro será el momento de tomar nuevas decisiones”, asevera el valenciano. La incógnita y el ‘secretismo’ se ha asentado en el PSOE. El silencio de Pedro Sánchez ha dado paso a las opiniones de sus barones territoriales. Si desde un primer momento Guillermo Fernández-Vara apostó por una “abstención mínima” que diese el gobierno a Mariano Rajoy, este miércoles otros compañeros socialistas han mostrado más prudencia: es el caso de Ximo Puig y Emiliano García-Page.
El presidente de la Comunidad Valenciana ha manifestado, tras reunirse con el propio Pedro Sánchez, que “no hay que correr más que el futuro”. Un mensaje donde la prudencia ha reinado: “Sé que siempre queremos pasar al futuro, pero el futuro llega. Cuando llegue el futuro será el momento de tomar nuevas decisiones”, ha sentenciado el socialista.
No obstante, Puig ha continuado con la línea que ha seguido Ferraz en los últimos días: el PP tiene en el Parlamento grupos conservadores para sumar en una investidura. “Hay una cuestión fundamental: el PSOE no es compañero de viaje del PP en esta aventura. Los ciudadanos han dicho que no. Hay votos conservadores suficientes en el Congreso y tiene que trabajar para conseguir apoyos, no solo a la investidura, sino a la gobernabilidad”, ha sentenciado el valenciano.
En el mismo camino ha continuado esta mañana Emiliano García-Page en una entrevista a la Cadena Ser. El presidente de Castilla-La Mancha ha descargado toda la responsabilidad en Sánchez, aunque le ha recomendado ser “coherente” en cuanto a la continuidad de Rajoy al frente del Ejecutivo. Porque, como más tarde dijese Puig, Page ha aseverado que la obligación política de intentar acuerdos con fuerzas ideológicamente afines la tiene el presidente del PP. “Si no, va a ser imposible abrir camino”, ha sentenciado el manchego. A pesar de lanzarse a los medios, Page tampoco ha faltado a su cita con la incógnita: “No podemos decir lo que haremos en el momento final”.
La contundencia llega desde Baleares
Más contundente se ha mostrado la presidenta de Baleares, Francina Armengol. Afín a pactar con Podemos en el 20-D, la socialista ha respondido con un rotundo “no”. “Para nada. El PSOE no puede hacer ese posible gobierno de derechas. Con nuestro voto, no”, ha incidido. “Tenemos proyectos políticos absolutamente diferentes. Por eso yo pienso que ni ahora ni después el PSOE no puede facilitar un gobierno del PP. Nosotros somos la alternativa al PP y sería traicionar a las políticas que hemos comprometido con los ciudadanos, a nuestra historia, a nuestros votantes y a nuestros militantes”, ha sentenciado Armengol.
De hecho, la opinión que ha emitido la líder balear tiene que ver con una
opción que ha abierto este miércoles Pablo Iglesias: que Sánchez vuelva a intentarlo. “Si Rajoy no consigue los votos necesarios para ser investido, porque se lo ha labrado estos cuatro años, hay otra opción posible: que lo intente Pedro Sánchez. Esa es mi posición. Si el PP y Rajoy demuestran que no pueden sumar lo suficiente para gobernar España, nuestro sistema democrático dice que lo lógico es que lo intente la segunda fuerza política más votada”, ha concluido Armengol.
