Según Acnur, el número de personas que permanece en los asentamientos de la Grecia continental supera en 10.000 al de las plazas disponibles en todo el Estado. A fecha de 10 de junio, 57.113 personas permanecen en los campos de refugiados y demás asentamientos provisionales dispuestos por el Gobierno griego a lo largo y ancho de todo el país. Según los datos del Ejecutivo de Alexis Tsipras, recogidos por Acnur, 48.196 de ellos se encuentran en las instalaciones de la parte continental de Grecia, y otros 8.197 refugiados e inmigrantes permanecen en campos instalados en las islas.
En ambos casos el número de migrantes es superior a las plazas disponibles, pero la parte no insular está mucho más saturada: el país afirma poder atender a 38.677 personas, por lo que hay 10.000 refugiados más respecto a las plazas disponibles en unos asentamientos por lo general muy precarios.
La mayor parte de ellos se encuentra en centros temporales, todos gestionados por las autoridades griegas. Acnur recaba los datos sobre las condiciones de vida en cada uno de los campos a través de la información de los gestores de cada centro, de la policía y de la observación directa, y actualiza progresivamente los datos en este mapa web.
Aunque los datos difieren de uno a otro campos, deben ofrecer tres comidas al día, situarse a menos de cinco kilómetros del centro de atención sanitaria más cercano y ofrecer: un baño por cada 20 personas, una duchara para cada cincuenta, una toma de agua o grifo para cada 250 y un promotor de higiene para cada 1.000 internos.
Hace apenas dos días que la Comisión Europea adoptara una nueva recomendación sobre las medidas específicas que Grecia debe adoptar para aplicar plenamente las normas de asilo de la UE, a fin de mejorar la gestión de la crisis de los refugiados.
La recomendación incide en que, a pesar de la difícil situación a la que se enfrenta Grecia, este país no ha cesado de esforzarse por mejorar su sistema de asilo desde la primera Recomendación adoptada en febrero, entre otras cosas mediante el aumento de la capacidad global de acogida y de la capacidad del servicio de asilo, y la creación de un marco para la asistencia jurídica gratuita y nuevos órganos de apelación.
No obstante, Bruselas opina que aún deben registrarse progresos antes de que los traslados con arreglo al sistema de Dublín a Grecia puedan reanudarse y se pueda alcanzar el objetivo fijado para finales de año.
Con el apoyo financiero de la Comisión, Grecia ha aumentado en gran medida su capacidad de acogida, tanto de migrantes en situación irregular como de solicitantes de protección internacional, y ha avanzado en la creación de oficinas regionales de asilo, así como en la contratación de más personal en el servicio de asilo para poder ampliar su capacidad de tramitación. El Servicio de Asilo griego tiene ahora el doble de capacidad desde el punto de vista de los recursos humanos que en 2015 y se ha progresado mucho en el procesamiento del gran número de asuntos de asilo pendientes.
En la recomendación se pide a Grecia que presente un informe a finales de junio, y posteriormente una vez al mes, para indicar los avances logrados y las medidas tomadas por las autoridades griegas para poner remedio a las deficiencias de su sistema de asilo.
