El presidente del Gobierno en funciones y el líder del PSOE alejan la posibilidad de un pacto de investidura en un encuentro marcado por los apretones de manos. El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, y el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, se han reunido esta tarde por primera vez desde que el Rey encargara a este último intentar formar ejecutivo. Y lo han hecho, en una reunión “útil” que apenas ha durado media hora y cuyo protagonismo ha recaído en un apretón de manos. Más bien, en la ausencia del mismo ante las cámaras.
Rajoy y Sánchez han escenificado en apenas 25 minutos la distancia que separa a ambos líderes ante la posibilidad de que PP y PSOE lleguen a un acuerdo de cara al gobierno de “gran coalición”. “El PSOE no va a ser parte de ningún Gobierno del Partido Popular”, ha asegurado el líder socialista en una rueda de prensa ante los medios de comunicación en la que ha admitido que no ha hablado con el jefe del Ejecutivo de los casos de corrupción que salpican a su partido, pero sí le ha pedido que “acabara la campaña del miedo” contra el PSOE.
Antes de que Sánchez compareciese, lo ha hecho Mariano Rajoy, que ha insistido en que “lo más sensato” es un gobierno presidido por el PP, ya que ha sido el vencedor en las pasadas elecciones generales. El jefe del Ejecutivo en funciones ha vuelto a poner sobre la mesa la necesidad de un pacto PP, PSOE y Ciudadanos y ha asegurado que Sánchez “ni me ha pedido el apoyo (para la investidura) ni me ha pedido que facilite nada”. Algo que ha confirmado minutos después el propio secretario general del PSOE.
A pesar de ello, Rajoy sigue en sus trece y ha remarcado que el PP va a trabajar “en que el PSOE facilite el Gobierno a la lista más votada”. Más allá de esto, el dirigente popular ha explicado que Pedro Sánchez “me ha dicho que suceda lo que suceda el PSOE tiene voluntad de mantener los Pactos de Estado”. Eso sí, sobre el documento del PP que el jefe del Ejecutivo le entregó ayer el socialista “no ha hecho ningún juicio de valor”.
El máximo responsable del Partido Popular no ha cerrado, una vez más, la puerta a presentarse a la investidura en caso de que Pedro Sánchez no consiga los apoyos necesarios.
Apretón de manos
Todo esto ha quedado en un segundo plano ante las imágenes previas a este encuentro en las que se veía a Rajoy negando el saludo a Sánchez delante de las cámaras. Ambos han restado importancia a esto y han asegurado que se han dado la mano en privado. “La realidad es que nos hemos dado la mano en privado y ese momento él estaba mirando a la cámara y no se ha dado cuenta», ha asegurado el líder socialista tras incidir en que han mantenido una reunión útil e importante.
