Vecinos de Arganzuela reclaman a la Asamblea que impida a Ciudadanos reactivar la Operación Calderón

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Vecinos de Arganzuela reclaman a la Asamblea que impida a Ciudadanos reactivar la Operación Calderón

Terrenos de la Operación Calderón

El movimiento asociativo de este distrito madrileño acusa a la formación de Rivera de “ser cómplice de la corrupción” al querer derogar la limitación de las tres alturas. El movimiento asociativo de Arganzuela ha registrado un escrito en la Asamblea de Madrid en el que pide a los grupos políticos que no aprueben -en el pleno del próximo día 10 de diciembre- reformar la ley del Suelo para derogar la prohibición de construir más de tres alturas, como ha propuesto Ciudadanos, partido al que acusan de “cómplice de la corrupción” ya que temen que la eliminación de la norma reactive una de las actuaciones urbanísticas más especulativas de la ciudad, la Operación Mahou-Calderón.

La Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid (Fravm) explica en un comunicado que con “su iniciativa para derogar la llamada “ley de las tres alturas”, el partido político que lidera Albert Rivera ha sembrado la inquietud en el vecindario del distrito de Arganzuela y soliviantado a su movimiento asociativo. E informa que 12 asociaciones de madres y padres de alumnos (AMPA) de otros tantos centros educativos de la zona, sus cuatro asociaciones vecinales y los diferentes colectivos sociales que componen el Espacio Vecinal Arganzuela, así como la Plataforma por la Educación Pública del distrito registraron ayer una carta en la que solicitan a los diputados de la Asamblea de Madrid que “recapaciten y no aprueben” la proposición de ley para derogar el punto 8 del artículo 39 de la Ley de Suelo que presentó Ciudadanos el pasado 20 de octubre.

El rechazo del movimiento ciudadano de Arganzuela a la iniciativa de Ciudadanos se une al ya expresado de manera rotunda por las organizaciones que componen la Plataforma por el Derecho a la Ciudad -integrada por colectivos como la Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid, Ecologistas en Acción, Madrid Ciudadanía y Patrimonio y el Club de Debates Urbanos- que considera que la propuesta que ha hecho la formación naranja para derogar la limitación de construir edificaciones de más de tres alturas “puede dar vía libre a grandes operaciones especulativas, que ahora mismo están paralizadas en los tribunales para beneficio de las empresas constructoras”. Haciendo notar el efecto negativo que podría tener esta reforma de la ley del suelo sobre operaciones especulativas paralizadas por la lucha vecinal y ecologista, como es el caso del proyecto Mahou-Calderón, u otras como la prolongación del Paseo de la Castellana (actual Distrito Castellana Norte), o Campamento”.

Tanto el movimiento asociativo de Arganzuela como la citada plataforma ciudadana subrayan que la proposición del partido emergente va más allá de derogar parte del citado artículo. “Lo más grave es que introduce una disposición adicional de farragosa redacción y compresión, con la que pretende cambiar de forma retroactiva (lo que podría ser inconstitucional), la manera de interpretar la limitación de las tres alturas”. Disposición que incluye nuevos criterios de interpretación que podrían “neutralizar la sentencia emitida por el Tribunal Superior de Justicia de Madrid, que ha anulado la operación urbanística Mahou-Calderón”, indican en su misiva las organizaciones sociales de Arganzuela.

Las asociaciones de Arganzuela se quejan de que “ahora, tras muchísimos años de lucha de David contra Goliat, en los que la ciudadanía ha conseguido parar en los tribunales el plan Mahou-Calderón gracias a la ley de las tres alturas, nos encontramos que, nuevamente, los vecinos somos los rehenes invisibles de la especulación urbanística”.

Hacen llegar a los diputados sus reivindicaciones para los terrenos afectados por la citada actuación: “Queremos otro plan para nuestro barrio, donde primen los intereses de la ciudadanía, y pensamos que la sentencia judicial [del TSJM] ofrece la oportunidad de definir ese nuevo proyecto”.

Y advierten al partido de Albert Rivera que aunque no quieren dudar de su buena fe “muy grave nos parecería que justamente fuera Ciudadanos, un partido que ha hecho bandera de la lucha contra la corrupción, quien vaya a ser, a la postre, cómplice de esta lacra”.

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