Jesús Sánchez Martos considera que las derivaciones a centros privados cuando hay medios públicos disponibles es un derroche económico. “No entiendo que tengamos quirófanos cerrados o aparatos de resonancia sin utilizar que nos están costando dinero, y derivemos a los pacientes a centros privados”, ha afirmado el nuevo consejero de Sanidad en la Comunidad de Madrid, Jesús Sánchez Martos. En una entrevista a Madridiario, el nuevo titular de la sanidad madrileña ataca una de las reivindicaciones de la comunidad médica anti privatización, dentro de la corriente de la Marea Blanca.
“No lo entendí nunca, jamás lo voy a entender. Pero cuando vi el programa de Cristina Cifuentes vi que dice lo mismo, o sea que pensamos de la misma forma”, afirma el consejero, que cree que la presidenta le ha nombrado precisamente por “no entender que a una persona, para acortar la lista de espera, se le envíe a un hospital privado para operar, mientras que en los hospitales públicos tengamos los quirófanos cerrados”·
“Un quirófano cerrado es mucho más caro que enviar a una persona a intervenirla en otro sitio”, declara tajante Sánchez Martos. “No entenderé que se envíe a hacer una resonancia de genética nuclear a un hospital privado”, prosigue, a pesar de puntualizar que también defiende la sanidad privada por entender que “es fundamental y que sumando esfuerzos todos vamos a ganar”. «Pero no se puede gastar dinero público para hacer una resonancia cuando el aparato de resonancias del hospital público está sin utilizar”.
“Eso se llama gestión racionalizada de los recursos”, explica el consejero, “lo que hace tu mujer en casa para gastar menos cuando el mes va mal”, comenta con el entrevistador.
Jesús Sánchez Martos también ha valorado en la entrevista su valoración de la nota que el Centro de Investigación Sociológica (CIS) ha dado a la sanidad madrileña: un 6,55, para el consejero una mala calificación, y afirma que su intención es “llegar a la matrícula de honor” y que quiere “pedir revisión de examen”.
