Villacís y Carmona critican el actual despilfarro aunque admiten no estar siendo informados por el consistorio de las medidas para el ahorro. El nuevo ejecutivo municipal de Madrid, encabezado por la alcaldesa Manuela Carmena, ha dado un primer paso para el ahorro en el alquiler de dependencias municipales en la capital. Se ha cerrado el traslado del equipo de Madrid Salud hasta uno de los casi 900 edificios de propiedad municipal, lo que supondrá un ahorro de unos 2 millones de euros anuales a partir de septiembre. Ese mes termina el contrato con la empresa propietaria, y el traslado ya ha sido licitado por algo más de 60.000 euros.
Se calcula que el Ayuntamiento de Madrid gasta unos 40 millones de euros al año en alquileres de edificios para organismos municipales, a pesar de contar con más de 850 edificios de titularidad pública en la capital. En este sentido, Carmena cuenta con el apoyo expreso de PSOE y Ciudadanos: ambos grupos recuerdan que el ahorro en alquileres también formaba parte de sus respectivos programas, aunque afirman no estar recibiendo «ningún tipo de información» sobre actuaciones del gobierno municipal en esta línea.
Ambos grupos no han elaborado más peticiones concretas porque están “recién llegados”, como admite Bosco Labrado, concejal de Desarrollo Urbano Sostenible de Ciudadanos. “Estudiaremos los contratos”, apuntan desde el grupo liderado por Begoña Villacís, “y plantearemos ahorrar en estas cuestiones porque es necesario”, apunta el concejal. Propone un traslado de su propia concejalía, antes llamada Urbanismo, que también se encuentra en dependencias alquiladas. El grupo afirma que apoyará cualquier actuación relativa al ahorro en alquileres y que estudiará con más detalle los casos concretos para realizar alguna “propuesta” al ejecutivo de Carmena.
Es una actitud parecida a la del grupo que apoyó la investidura de la alcaldesa, el PSOE de Antonio Miguel Carmona: “Respetando las funcionalidades de los edificios y del personal” el grupo se muestra a favor de eliminar alquileres, que supone “una fortuna” a cargo de las arcas municipales según Manuel Arias, encargado de prensa de los socialistas. En cuanto a contratos de alquiler que ya están cerrados por el gobierno anterior y que aún tienen años de vigencia, el PSOE plantea que “no se puede gastar el triple en indemnizaciones” de lo que costaría el propio alquiler, aunque “obviamente con el tiempo sería rentable”. Por eso también son partidarios de valorar cada caso por separado.
Alquileres desorbitados de herencia popular
La cuestión de los contratos de alquiler cerrados por el gobierno de Ana Botella, anterior alcaldesa, se ejemplifica con el edificio que acoge a la concejalía de Economía y Hacienda. Según Economía Digital, su alquiler asciende unos 15.000 euros diarios, y el contrato tiene vigencia hasta 2019. El concejal de Economía, Carlos Sánchez Mato, ha confirmado que su equipo estudia las condiciones del contrato para valorar si es posible evitar el abultado alquiler cuatro años más.
El edificio, en plena calle Alcalá, fue adquirido por el ejecutivo de Alberto Ruiz Gallardón en 2007, y una vez reformado fue vendido a Sacyr, que pasó a alquilarlo al propio Ayuntamiento.
Estos polémicos movimientos de los ejecutivos de Gallardón y Botella son defendidos por el actual grupo municipal de Esperanza Aguirre, que sostiene que en determinados casos “la venta de un inmueble de propiedad pública y su alquiler posterior” puede ser lograr un ahorro. «Este tipo de movimientos se ha hecho en muchos sitios», señalan desde el PP de Madrid.
“Nosotros estamos siempre con el ahorro”, apunta el grupo, que no contempla realizar peticiones en este sentido a la actual alcaldesa y evita valorar el gasto en alquileres proyectado por el anterior gobierno municipal.
