CCOO y UGT piden al Fátima Báñez una reunión para evaluar las la escasa repercusión de este plan y con objeto de reactivarlo. Solo 28.037 jóvenes inscritos como desempleados están cubiertos por el Plan de Garantía Juvenil, cuando hay 387.501 menores de 25 años registrados como desempleados en el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), antiguo INEM.
Por ello, CCOO y UGT demandan al Ministerio de Empleo, concretamente a la secretaria de Estado de Empleo, Engracia Hidalgo, una reunión para evaluar la escasa repercusión de este plan en el empleo de los jóvenes y con el fin de reactivar dicho programa.
Y es que ambas organizaciones sindicales denuncian que bajo la Garantía Juvenil solo está un 7,2% de los jóvenes inscritos como desempleados (28.037 a 28 de febrero), cuando hay 387.501 menores de 25 años registrados como parados en el INEM y 762.800 que lleva más de un mes buscando un empleo, según datos de la EPA (IV Trimestre 2014), según informa CCOO en su página web.
Y recalcan que esto sucede a pesar de que con esta iniciativa se “pretendía dar soluciones al problema del desempleo juvenil, con el fin de que pudieran recibir en un plazo máximo de cuatro meses una oferta de empleo, de educación o formación, tras haber finalizado sus estudios o quedar desempleados”.
Hay que recordar que a este programa, tal y como se informa en la web del Ministerio, “pueden acogerse jóvenes, no ocupados ni integrados en los sistemas de educación o formación, que sean mayores de 16 años, y menores de 25 (o menores de 30 años, para personas con discapacidad igual o superior al 33%).”
Y tiene por finalidad que“los jóvenes “puedan recibir una oferta de empleo, educación continua, formación de aprendiz o período de prácticas, tras acabar la educación formal o quedar desempleados”. Eso sí cumpliendo una serie de requisitos establecidos y dándose de alta en el programa.
Obstáculos
Y es ahí donde radica parte del problema ya que para UGT y CCOO, existen varios elementos que dificultan su funcionamiento, como los obstáculos para darse de alta en el registro mediante el procedimiento informático.
Además, los sindicatos constatan que “la política de bonificaciones a las empresas se olvida de las necesidades reales de los jóvenes y que no pone en marcha medidas que mejoren de manera real la empleabilidad de los jóvenes.
Además, se quejan de que “las acciones de formación son casi inexistentes” haciendo notar que “la paralización de la puesta en marcha de las Agencias de Colocación está impidiendo que los jóvenes inscritos cuenten con itinerarios personalizados y se extiende el efecto desánimo entre este colectivo, borrándose de las listas de los Servicios Públicos de Empleo”.
