Las farmacéuticas suelen considerarse entre los activos refugio por excelencia, sin embargo el laboratorio ha perdido cerca de un tercio de su capitalización en el año.
Las alzas han llegado a Almirall después de siete sesiones consecutivas de retroceso. El rebote generalizado de las Bolsas europeas se contagia al laboratorio farmacéutico en el día en que se despide de su vicepresidente financiero, cuyo anuncio de partida ha coincidido con avances del 3,13% para su gráfica de cotización.
El cambio en la cúpula de Almirall se ha notificado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) apenas una hora después de la apertura de la sesión negociadora, cuando se han producido los cruces más alcistas de la sesión. En ellos, las acciones de la compañía han llegado a pagarse a 13,16 euros por acción, superando una cota que invita a pensar en próximas ganancias después del castigo acumulado.
A lo largo de su última racha bajista, el valor ha sufrido la pérdida de un 12,2% de su valor en Bolsa. En lo que va de año, incapaz de hacer valer su carácter refugio frente a la comunidad inversora, la compañía ha visto diluirse cerca de un tercio de su capitalización bursátil, que hoy se sitúa en los 2.248 millones de euros.
En la comunicación remitida al supervisor del mercado se explica que, “tras ocho años de trabajo”, Daniel Martínez abandona su actual puesto como vicepresidente ejecutivo financiero del grupo. Los motivos no son otros que “afrontar un nuevo reto profesional como CFO [director financiero] de una compañía de gran tamaño en bienes de consumo, trasladándose a vivir al Reino Unido”. En el pasado, según figura en su perfil personal en una red social profesional, ya ejerció cargos de responsabilidad financiera en el aglomerado PepsiCo.
Hace solo unos días la compañía fue noticia también porque sus máximos directivos y accionistas, los hermanos Gallardo, aparecían en los ‘papeles de la Castellana’ por haberse beneficiado de la amnistía fiscal del ministro Cristóbal Montoro. Jorge y Antonio Gallardo Ballart se habrían valido de esta ventana de legalizaciones instaurada a mediados del año 2012 para declarar una fortuna cercana a los 113 millones de euros.
