La OPA de Slim por Realia tan solo ha logrado la aceptación de un 0,04% del capital al que se dirigía, con lo que el desembolso a afrontar se queda lejos del máximo de 258 millones. Carlos Slim ha conseguido su objetivo por partida doble a pesar del aparente fracaso de su OPA por Realia. El mexicano ha logrado incrementar su control sobre la inmobiliaria a un precio de ganga que, a la par, ha cosechado una aceptación tan escasa como para esquivar el desembolso de unos capitales que le serán de utilidad en su puja por FCC.
El periodo de aceptación de la oferta de compra del magnate mexicano ha culminado con la aceptación de la misma por tan solo un 0,03% de su capital social. Un porcentaje irrisorio que se traduce en 121.651 acciones de Realia que, sin embargo, ayudarán a incrementar la cartera de Slim por tan solo 97.000 euros. Muy lejos de los 258 millones de euros que habría tenido que sacar de su caja fuerte de haber recibido la adhesión de los más de 321 millones de acciones a los que teóricamente se dirigía su OPA.
Los analistas subrayan que la oferta se trató más de una respuesta a la obligación legal sobrevenida por la superación del 30% del capital de la inmobiliaria que a una intención real de control absoluto. En este sentido, el mexicano ya figura como máximo accionista de la compañía sólo por detrás de FCC en el registro de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Y, por si fuera poco, él es a su vez ya el mayor accionista de la constructora, por delante incluso de Esther Koplowitz, por lo que el control indirecto es aún mayor.
Asimismo, los expertos destacan que la intención de Slim ahora es concentrar su músculo inversor en su puja por la constructora FCC y, en menor medida, en su filial de áridos Cementos Portland, por la que este mismo jueves ha lanzado oferta de compra a un precio muy ligeramente por encima del de mercado. Por cada una de las acciones de la cementera ha puesto sobre la mesa 6,00 euros, precio que ha marcado la mayoría de cruces de esta sesión sin que en ningún caso se superase esta cota, como sí ocurrió con los 0,80 euros ofrecidos por los títulos de Realia.
La inmobiliaria queda pues pendiente de su regreso al índice Ibex Small Cap, del que el Comité Asesor Técnico que decide su composición la fulminó el pasado 9 de mayo con efectos a partir del pasado viernes a la espera de que se resolviera la referida OPA por el impacto en la liquidez de sus títulos que la operación pudiera tener, llegando incluso a realizarse su exclusión bursátil. Realia ha cerrado este jueves sesión un 0,5% arriba en los 1,01 euros por acción.
