El embajador cubano señala oportunidades para España en biotecnología

Latinoamérica

El embajador cubano señala oportunidades para España en biotecnología

Eugenio Martínez Enríquez, embajador de Cuba en España

Eugenio Martínez Enríquez ha descartado también que un posible cambio de Gobierno tenga efectos en las relaciones entre los dos países El embajador de Cuba en España, Eugenio Martínez Enríquez, ha destacado hoy las oportunidades de inversión que existen para las empresas españolas en el sector cubano de la biotecnología y la producción de medicamentos cubano al que se ha referido como «especialmente interesante para España».

En concreto, en un evento organizado por el «Club de la Tertulia», Martínez Enríquez ha destacado una vacuna llamada Heberprot-B que evitaría el 85% de las amputaciones que se producen como resultado de la diabetes. Una innovación que, sin embargo, por motivos regulatorios -apuntó- no estaría encontrando acceso en estos momentos ni al mercado común europeo ni al estadounidense, donde gracias a dicho medicamento se podrían evitar hasta 70.000 amputaciones.

El Heberprot-B, por cierto, es uno de los productos que la Medical Education Cooperation with Cuba (MEDICC) ha destacado como motivo por el que el presidente estadounidense Barack Obama debería priorizar mejorar la cooperación en materia de Salud en su inminente viaje a Cuba. De esta forma, según señala específicamente esta organización, se podría dar lugar a «la creación de joint ventures» entre los dos paíes.

«Esperamos que el presidente vea de primera mano el potencial de colaborar con los centros líderes de la biotecnología cubana, sus escuelas de medicina y su gran sistema público de salud», ha declarado el director ejecutivo de dicha organización, el Dr. Pierre LaRamée. Y, precisamente, Medicc también apunta a que Obama podría «eliminar barreras en el proceso regulatorio de aprobación a los productos cubanos de biotecnología». Una medida que podría impulsar por la vía ejecutiva; es decir, evitando los obstáculos que imponen el embargo y la Ley Helms-Burton.

No obstante, más allá de este producto, hay que señalar que el embajador cubano ha apuntado hoy que existen muchas más oportunidades de cooperación en dicho sector de la biotecnología y de producción de mdedicamentos. Si bien, eso sí, no todas tan impactantes como la señalada.

En un entorno que ha destacado por una serie de intervenciones ciertamente hostiles, más interesadas en criticar la situación política de la Isla que en las oportunidades que ofrece la nueva coyuntura económica; Martínez Enríquez apuntó que Cuba pretende mantener la «propiedad estatal de los medios fundamentales de producción». Además, el Gobierno de la Isla impulsará medidas para evitar la concentración de propiedad en aquellos sectores donde progresivamente se está promoviendo la introducción de cooperativas.

No obstante, el embajador destacó que para el proceso de reformas que el país caribeño está poniendo en marcha, las autoridades cubanas están estudiando «modelos de 29 países» para introducir elementos que les permitan «actualizar» el suyo. Modelos que evidentemente «no son todos socialistas».

Asimismo, Martínez Enríquez descartó que un posible cambio de Gobierno en España tenga efectos en las relaciones entre los dos países y, quizá para evitar las suspicacias manifestadas por el público presente, declaró: «No tengo relaciones con Podemos«.

Finalmente, el embajador cubano insistió una vez más en la necesidad de que el país caribeño tiene de recibir inversiones internacionales, por lo cual la financiación de organismos multilaterales sería muy bienvenida. No obstante, descartó que sea Cuba quien solicite la readmisión en la OEA, requisito previo para acceder al Banco Interamericano de Desarrollo (BID) ya que al haber sido la isla expulsada del organismo, le correspondería a la OEA reabrirle sus puertas, según criterio de Martínez Enríquez.

Más información