Las grandes corporaciones estadounidenses se duelen del efecto divisa por la caída del euro y otras monedas frente al ‘billete verde’. La revalorización del dólar en el mercado global de divisas está presentando su rostro menos amable en las cuentas de las grandes corporaciones de Wall Street. El llamado efecto divisa que lastra la facturación de las cotizadas estadounidenses fuera de su mercado doméstico ha caído como plomo sobre Microsoft y P&G entre otras muchas.
En los cruces más críticos de esta sesión de martes en las que tocaba presentar cuentas trimestrales, las acciones de Microsoft han llegado a caer más de un 9%. La gigante de productos de gran consumo Procter & Gamble ha visto evaporarse cerca de un 4% de su valor en la Bolsa de Nueva York. Incluso la industrial Caterpillar, más alejada del impacto de la apreciación del dólar en el sector del consumo, ha experimentado una debacle del 7% en su gráfica de cotización.
Aunque en términos generales, la mayor parte de las cifras de los balances de las grandes compañías de Wall Street han conseguido cumplir con las previsiones del mercado, aquellas que hacen una referencia más explícita a la facturación son las que más se resienten. La pérdida de valor de los ingresos en el exterior debido a un dólar en máximos de 11 años hace que sobre todo las compañías ligadas al gran consumo no consigan colmar las expectativas de los analistas que más de cerca siguen sus finanzas y, a la postre, sufran un sonoro castigo en el mercado de valores.
Este mismo lunes, el Índice Dólar EEUU que mide el valor de la divisa norteamericana frente a sus principales pares internacionales tocó máximos desde septiembre del año 2003. Sólo en lo que va de año este indicador ha sumado un 4% a su imparable escalada de los últimos meses. En esta última ocasión, según señalan los expertos en el mercado forex -de divisas-, en gran medida a consecuencia del programa de flexibilización económica para la Zona Euro anunciado por Mario Draghi.
Caterpillar, la gran afectada hasta la fecha que más se aleja de los parámetros comentados, obtuvo en 2014 un beneficio neto de 3.695 millones de dólares, unos 3.259 millones de euros al cambio. Una cifra que precisamente por el efecto de la conversión desde esta última moneda y otras supone un 2,5% menos que hace un año.
En el caso de la gigante tecnológica Microsoft, su consejero delegado Satya Nadella no ha dudado en atribuir a la apreciación del dólar sus modestas cifras que han logrado cumplir por la mínima las previsiones del mercado pero han forzado a recortar las dibujadas para los primeros compases de este 2015. El frenazo de mercados como China y Japón debido a la ralentización de su economía también han sido factores que la criatura de Bill Gates ha esgrimido como causantes de unas ganancias de 0,71 dólares por acción que no han sorprendido a ningún inversor, sino más bien lo contrario.
