Banco Espírito Santo sufre el mayor desplome de la historia de la Bolsa portuguesa tras sus pérdidas millonarias

Bolsa

Banco Espírito Santo sufre el mayor desplome de la historia de la Bolsa portuguesa tras sus pérdidas millonarias

Banco Espirito Santo

Las acciones del banco portugués llegaron a retroceder un 51% tras su regreso a la cotización, un nuevo récord negativo en el parqué lisboeta desde que hay registros informáticos. Las acciones de Banco Espírito Santo (BES) llegaron a desplomarse hoy hasta un 51%, un nuevo récord negativo en la Bolsa de Lisboa desde que hay registros informáticos, después de que ayer la entidad anunciase unas pérdidas de 3.577 millones de euros y su intención de realizar una nueva ampliación de capital para apuntalar su solvencia.

Según publica la agencia Efe, que cita fuentes de la empresa que gestiona el PSI 20, el desplome del BES, posteriormente suavizado, es el mayor registrado nunca en el selectivo lisboeta. Las acciones del banco luso llegaron a cotizar hoy a 17 céntimos, un nuevo mínimo para la entidad.

El desplome se ha producido a pesar de que los títulos del BES comenzaron a cotizar dos horas más tarde de lo normal por orden de la Comisión del Mercado de Valores Mobiliarios (CMVM) lusa, que pretendía de esta forma dar tiempo a los inversores para analizar toda la información divulgada sobre el BES entre la noche de ayer y la madrugada de hoy.

A las 10.14 horas sus títulos volvieron a intercambiarse en el parqué lisboeta y lo hicieron a 20 céntimos, lo que suponía un retroceso del 40% respecto al cierre de ayer, y apenas cuatro minutos más tarde llegó a marcar un nuevo mínimo, con un descenso del 51%, hasta los 17 céntimos. A media tarde, las acciones del BES caían un 37% hasta los 22 céntimos de euro.

El banco portugués, envuelto en la polémica en los últimos meses, anunció ayer por la tarde unas pérdidas de 3.577 millones de euros, así como su intención de lanzar una nueva operación para ampliar capital que le evite tener que ser rescatado por el Estado.

El Banco de Portugal, encargado de supervisar el sector financiero del país, también ha ayudado al pánico de los inversores al reconocer que vislumbra “ilegalidades” en la gestión de la entidad, razón por la cual ha decidido retirar el derecho de voto a la familia Espírito Santo, su máximo accionista con una participación del 20,1%, y suspender a tres de sus administradores.

Más información