La mandataria alemana prometió en las elecciones generales de 2013 que en breve alcanzaría un acuerdo de antiespionaje con Estados Unidos. El escándalo del espionaje pasa factura a la canciller alemana, Angela Merkel, entre los alemanes: uno de cada tres se siente defraudado por ella, de acuerdo con una encuesta publicada hoy.
La mandataria alemana prometió en las elecciones generales de 2013 que en breve alcanzaría un acuerdo de antiespionaje con Estados Unidos. Sin embargo, con el tiempo esta promesa cayó en saco roto.
Un 37 por ciento de los alemanes se sienten desfraudados por todo el el escándalo del espionaje de la Agencia Nacional de Seguridad de Estados Unidos (NSA), según la encuesta elaborada por Forsa para la revista alemana «Stern».
Sin embargo, un 59 por ciento de los encuestados no cree que Merkel mintiera de manera consciente poco antes de las elecciones en las que volvió a salir reelegida.
Esta opinión difiere si se tiene en cuenta la ideología política. Entre los partidarios de La Izquierda, un 59 por ciento cree que lo hizo de manera consciente. Entre los Verdes, un 52 por ciento señaló que lo hizo para ganar las elecciones. Entre los simpatizantes del SPD, esta cifra cae hasta el 38 por ciento y a un 21 por ciento entre los de la Unión Cristianodemócrata (CDU) de Merkel.
A pesar de que el escándalo del espionaje se reavivó después de que saliera a la luz recientemente que los servicios secretos alemanes para el exterior (BND) ayudaron a la NSA a la hora de espiar en Europa, sólo una quinta parte de los alemanes (20 por ciento) ve este asunto como algo muy importante.
Un 32 por ciento cree que es importante, mientras a un 48 por ciento no le interesa en absoluto todo el debate abierto, a pesar de que parece haber empezado a resquebrajar el gobierno de coalición con el Partido Socialdemócrata (SPD).
