El economista y asesor financiero David Betsebé ha sido designado como nuevo administrador de la maltrecha entidad. En breve se cerrará la hoja de ruta para su resolución. La crisis de Banca Privada d’Andorra (BPA) entra desde este lunes en un nuevo capítulo. La recientemente creada Agencia Estatal de Resolución de Entidades Bancarias (Areb) ha asumido de forma efectiva la tutela de la maltrecha entidad matriz de Banco Madrid mediante el nombramiento de un economista como administrador.
En un comunicado oficial del organismo financiero andorrano se explica que esta asunción de tutela marca el principio del fin de BPA, abocado a su resolución por los problemas financieros derivados de su implicación en operaciones de blanqueo de capitales y evasión fiscal en varios países. El designado para conducir esta etapa en la entidad ha sido el economista y asesor financiero David Betsebé.
El elegido trabajó como director de Banca Privada Internacional del Grupo Financiero Crèdit Andorrà, entidad en cuyo comité ejecutivo también fue miembro. Estos cargos los abandonó el año pasado con el objetivo de iniciar un proyecto personal dedicado al asesoramiento financiero. En su currículo figuran los títulos de licenciado en Ciencias Económicas y Sociales por la Universidad de Toulouse, un máster en finanzas por Esade y el diploma de Analista Financiero Europeo Certificado (CEFA).
Los escenarios por los que ahora tendrá que optar Betsebé van desde la transmisión de los activos y pasivos de BPA a una entidad puente hasta la venta total o parcial del negocio hasta la liquidación de la entidad. El proceso se guiará por la normativa europea para estos casos además de por la ley andorrana creada con urgencia a partir de este caso y en virtud de la cual se creó la propia Areb a modo de ‘banco malo’.
Con este movimiento, la Areb da continuidad a las medidas cautelares tomadas hasta ahora por el Instituto Nacional Andorrano de Finanzas (INAF, por sus siglas en catalá. El organismo supervisor del sistema financiero del país pirenaico prevé que en las próximas semanas se pueda cerrar el plan de resolución de BPA. En este sentido, pronto se espera culminar la creación del Fondo Andorrano de Resolución de Entidades Bancarias (Fareb), con una dotación de 30 millones de euros destinados a financiar las medidas que se estimen oportunas para zanjar la crisis de la entidad.
