La CE ha dicho este miércoles que el país galo «no tiene tiempo que perder» y que debe acelerar las reformas estructurales para impulsar, el empleo, el crecimiento y la competitividad. La Comisión Europea (CE) ha dicho este miércoles que Francia «no tiene tiempo que perder» y debe acelerar las reformas estructurales para impulsar el crecimiento, el empleo y la competitividad, después de la formación del nuevo Gobierno galo.
«Consideramos que es importante que el primer ministro, Manuel Valls, haya ratificado la intención de su Gobierno de mantener la dirección de las reformas, que son esenciales para fomentar el crecimiento y el empleo en Francia y para asegurar que el crecimiento permanezca sostenible», ha señalado el portavoz comunitario de Asuntos Económicos y Monetarios, Simon O’Connor.
Éste ha recordado que, al mismo tiempo, Francia debe consolidar las finanzas públicas, después de que París afirmara que no podrá cumplir el objetivo de reducción del déficit, según recoge Efe.
«Es urgente para Francia, pero también para otros países en situación similar, que aceleren el trabajo que están haciendo en el camino de las reformas estructurales a fin de lanzar el crecimiento -uno que sea sostenible en el futuro- y relanzar la competitividad y el empleo», ha indicado el portavoz comunitario.
O’Connor ha afirmado que «por supuesto, la CE está preparada para apoyar los esfuerzos que haga Francia» al respecto y que el Ejecutivo comunitario revisará la situación de ese país y de los demás de la zona euro en otoño.
Los Estados miembros de la zona euro deben enviar hasta el 15 de octubre sus proyectos presupuestarios a la CE, que publicará además a principios de noviembre sus nuevas previsiones macroeconómicas y emitirá a mediados de ese mismo mes su opinión detallada sobre si los planes individuales cumplen los objetivos de consolidación fiscal acordados.
O’Connor ha recordado que la CE ya predijo en sus previsiones de primavera que Francia probablemente incumplirá este año el objetivo de reducción del déficit en términos nominales, pero subrayó que el elemento importante para Bruselas es el esfuerzo estructural y que en este sentido Francia estaba entonces en vía de cumplirlo.
La Comisión analizará en otoño cómo ha evolucionado la situación de Francia, pero para poder hacer este análisis y adaptarlo a eventuales cambios «tendremos que tener compromisos concretos» en el plan presupuestario que París entregará a Bruselas, ha señalado.
