La ‘app’ de transporte que cerró la justicia a finales del mes pasado, quiere volver a la actividad, pero esta vez contratando solo a conductores que cuentan con la autorización exigida para el transporte de personas. La polémica aplicación de transporte Uber, que el mes de diciembre del año pasado abandonó España después de que el juez la prohibiera, quiere regresar a la actividad en nuestro país, pero esta vez ajustándose a la legalidad. La compañía contratará solamente a conductores que cuenten con la licencia necesaria para el transporte de personas y pasará a llamarse UberX.
Según ha publicado El Mundo, la aplicación exigirá la disposición de la autorización administrativa de Vehículos de Turismo con Conductor (VTC) para poder trabajar para ella, aunque promoverá cambios regulatorios acerca de las exigencias para este tipo de licencias.
“La restricción artificial de licencias VTC y tiene consecuencias negativas: por un lado, quienes quieren trabajar como conductores no pueden, aunque exista demanda de estos servicios. En segundo lugar, no alivia la congestión de tráfico. Los precios de los trayectos son más caros, los tiempos de espera más largos y la disponibilidad de vehículos más limitada”, ha apuntado Carles Lloret, responsable de la empresa en España, recoge el citado medio.
Tras el cierre de la ‘app’, Uber intentó reflotar el negocio en Barcelona con el reparto de comida a domicilio, pero finalmente parece que optará por este nuevo modelo de negocio, con el que pretende restablecer su relación con las Administraciones pertinentes y esquivar las presiones de los taxistas.
