Las presiones de la Federación Internacional de Trabajadores del Transporte y varias ONG han llevado al organismo internacional a dar marcha atrás en su asociación con la polémica ‘apps’. La polémica ‘app’ de transporte colaborativo Uber anunció el pasado 10 de marzo una asociación con ONU Mujeres para ofrecer hasta un millón de puestos de trabajo para mujeres conductoras hasta 2020. Una oportunidad de limpiar su imagen ante las críticas de los taxistas de medio mundo y las trabas legales con las que se está encontrando.
“Hoy, ONU Mujeres y Uber anuncian el lanzamiento de una nueva alianza para trabajar juntos en todo el mundo hacia la igualdad de género y el empoderamiento de la mujer”, prometía Travis Kalanick, consejero delegado de Uber, en el marco del vigésimo aniversario de la Declaración de Beijing sobre los derechos de las mujeres, del que la compañía fue patrocinador.
Pero ante las presiones de los taxistas y varias ONG, la ONU ha decidido dar marcha atrás y cancelar el acuerdo, según informa Bloomberg. La portavoz Nanette Braun ha agradecido a Uber su apoyo en el acto, pero ha asegurado al medio que, de momento, no tienen previsto “ampliar la colaboración”.
Aunque, por su parte, Uber ha apuntado que aún espera «crear un millón de empleos para las mujeres» e intentará que ONU Mujeres y grupos de todo el mundo ayuden lograr ese objetivo.
La noticia se conoce después de que la Federación Internacional de Trabajadores del Transporte hubiera cagado duramente contra esta asociación del grupo de la ONU y Uber, señalando que los puestos de trabajo que crearía la ‘app’ de transporte probablemente serían “inseguros y peligrosos” .
Y es que, otra de las controversias generadas por la compañía son los casos de agresión denunciados por pasajeras en Boston y en la India.
