El menor margen de ganancia por la venta de ‘smartphones’ lastra las cuentas del fabricante coreano. Pese a los constantes lanzamientos de nuevos ‘smartphones’ en los últimos meses, el fabricante coreano Samsung no vive un buen momento. Sus beneficios operativos cayeron de julio a septiembre un 60% respecto al mismo período del año pasado, hasta los 4,06 billones de wones (3.050 millones de euros).
Precisamente, los móviles tienen mucho que ver con el descenso de los beneficios de la compañía, pues el desplome se achaca al menor margen de ganancia por cada terminal vendido, lo que ha llevado directamente a una caída de las cifras de ventas. En concreto, los ingresos por la comercialización global de dispositivos alcanzaron el pasado trimestre los 47,4 billones de wones (35.613 millones de euros), un 19,6% menos que en el mismo tramo de 2013.
Según los datos revelados por Samsung, la división de informática y comunicaciones móviles sufrió un descalabro de su beneficio operativo del 74% en términos interanuales, mientras que la facturación por ventas cedió un 32,8%.
Así, el fabricante registró de julio a septiembre la cifra de beneficios más baja desde 2011 y fue la primera vez en tres años que reduce su beneficio operativo dos trimestres seguidos. Sin embargo, es optimista para el cuarto trimestre del año: espera un ligero aumento de las ganancias gracias a la demanda de televisores y chips de memoria.
