Los integrantes del comité de dirección de Caja Madrid percibieron entre 2006 y 2011 71,5 millones de euros, señala IU en su querella. La querella que Izquierda Unida ha presentado ante la Audiencia Nacional contra 32 exdirectivos de BFA y Bankia ha dejado también en evidencia las cuantiosas retribuciones que Caja Madrid pagó al equipo directivo que lideraba Miguel Blesa en la época en la que la entidad sacó al mercado las polémicas participaciones preferentes en las que quedaron atrapados miles de pequeños ahorradores.
En Caja Madrid, según los datos aportados por la propia Bankia a la Audiencia Nacional, los integrantes del comité de dirección percibieron entre 2006 y 2011, señala IU en su querella, 71,5 millones de euros. Dentro de esta suma no se incluyen las percepciones de los miembros del consejo de administración, por lo que la cifra puede ser “muy superior a lo conocido”, considera la formación política que lidera Cayo Lara.
El expresidente de Caja Madrid Miguel Blesa, con 12,4 millones de euros, se lleva la palma en lo que se refiere a la percepción de sueldos e indemnizaciones, si bien también destacan los directivos Matías Amat Roca e Ildefonso Sánchez Barcoj, con 9,7 millones de euros cada uno entre 2007 y 2010, señala IU.
Al margen de la suma, los correos profesionales internos de Caja Madrid dirigidos o recibidos por Miguel Blesa a otros empleados de Caja Madrid han destapado el caso del ex secretario general de Caja Madrid Enrique de la Torre. Este, que fuera número dos de Blesa percibió al menos 4,78 millones. Pero lo que llama la atención, es que De la Torre percibió 2,66 millones por unas retribuciones que él mismo había negociado, tal y como consta en un acta del 19 de julio de 2007, señala IU en su querella. La forma de pago consistió, según la formación política, en que Caja Madrid destinó el dinero a la cancelación de un crédito que había solicitado previamente De la Torre a Caja Madrid.
En mayo de 2009, Caja Madrid lanzó una emisión de 1.500 millones de euros en preferentes, que amplió hasta 3.000 millones dada la alta demanda recibida. Según el folleto, estos títulos debían pagar un cupón del 7% durante los primeros cinco años, plazo a partir del cual la remuneración pasaría a ser de Euríbor más el 4,75%.
Según los cálculos del mercado, unos 92.000 clientes minoristas, es decir, pequeños ahorradores, quedaron atrapados en estos títulos, sufriendo además una quita media del 36% obligada por Bruselas cuando Bankia fue rescatada. A pesar del proceso de arbitrajes puesto en marcha el año pasado, muchos de ellos aún no han recuperado sus ahorros.
Izquierda Unida ha presentado una querella en la Audiencia Nacional contra todos los antiguos miembros del consejo de administración de Bankia y BFA, así como contra las entidades como personas jurídicas, a los que atribuye los delitos de asociación ilícita, contable, estafa, apropiación indebida, administración desleal, falseamiento documentos e información. Esta querella estará centrada en la comercialización de las polémicas participaciones preferentes y las consecuencias penales que de ello se puedan derivar, así como en la salida a Bolsa del banco en julio de 2011 y en las retribuciones que percibieron sus directivos.
