La Generalitat de Cataluña ha consumado este jueves la privatización de la empresa pública Aigües Ter Llobregat. El beneficiario, como ya se anunció hace unos días ha sido el consorcio liderado por la cotizada Acciona, que se ha comprometido al desembolso de 995,5 millones de euros. Una partida que ayudará a cuadrar las complicadas cuentas anuales de la administración catalana.
En concreto, ATLL Concessionaria, participada al 39% por Acciona, se ha comprometido con la firma del contrato de privatización celebrada hoy a satisfacer de forma inmediata 298,65 millones de euros, que son los que ayudarán a cuadrar el déficit de Cataluña a los límites fijados por equipo de Mariano Rajoy. El resto, 696,85 millones de euros, se pagarán en anualidades a lo largo del medio siglo de vida improrrogable que tiene el contrato firmado hoy.
Del consorcio que lidera Acciona y en el que participa también, entre otros, el banco de inversión brasileño BTG Pactual, dependerá desde ahora la construcción, mejora, gestión y explotación de las instalaciones que constituyen la red de abastecimiento de Ter Llobregat. Así se convertirá en el responsable del tratamiento, almacenamiento y suministro de agua en el área metropolitana de Barcelona y otras comarcas cercanas.
Al concurso de privatización también concurrió Aguas de Barcelona (Agbar) que recientemente denunció el proceso de licitación del mismo. Además, las elecciones autonómicas en Cataluña y las dificultades para formar gobierno entre CiU y ERC habían pospuesto la fecha de firma del contrato hasta hoy, en el tiempo de descuento para poder contabilizar la operación en las cuentas de este 2012 ingrato para las cuentas de muchas regiones españolas.
