La apuesta por el dólar de José María Aznar a la hora de gestionar el patrimonio de su empresa Famaztella le ha salido rentable al expresidente de Gobierno. La compañía logró capear las horas bajas de 2010 gracias a su preferencia por la divisa americana frente al débil euro. Una situación que, dada la crisis que atraviesa la moneda común, es de esperar que se repita incluso con más éxito en sus cuentas de 2011.
La compañía, que toma su nombre como acrónimo de Familia Aznar Botella, se dedica a gestionar los derechos de propiedad intelectual del expresidente de Gobierno y los de su mujer Ana Botella, la recién estrenada alcaldesa de Madrid, cerró 2010 con una cifra de negocio de 214.791 euros. Mientras tanto, su beneficio, a pesar de haberse reducido a la mitad, fue de 225.277 euros, según lo depositado en el Registro Mercantil de Madrid.
Esta diferencia entre cifra de negocio y beneficios, las explica el diario El País en la apuesta de Famaztella por la divisa norteamericana. Los ingresos financieros, no computables a efectos de cifra de negocio pero sí de resultado final, obtenidos por el matrimonio con la conversión sobre el papel de las cifras en dólares supusieron 62.000 euros a favor de los Aznar en las cuentas de 2010. En ese año, el euro perdió un 6,6% de su valor frente al ‘billete verde’, con los que las partidas en moneda estadounidense de las cuentas de Famaztella gozaban de mayor valor al cierre del ejercicio que en sus inicios.
La firma del expresidente y la alcaldesa fue creada con 3.000 euros de capital inicial y hoy por hoy gestiona un patrimonio de 1,8 millones de euros, de los cuales unos dos tercios (1,2 millones) están en dólares. La compañía no ha precisado a el diario que adelantaba la información a qué tipo de activo corresponde este patrimonio en divisas.
La relación de Aznar con la moneda americana no se limita únicamente a la gestión del patrimonio de su propia compañía. El exlíder popular recibió el pasado ejercicio un total de 100.000 dólares en efectivo como pago a sus servicios como consejero de News Corporation, el aglomerado de medios del magnate Rupert Murdoch, donde recientemente revalidó su puesto con un 84,4% de votos afirmativos entre los accionistas de la cotizada.
