Moral Santín asegura que nadie le pidió explicaciones por retirar dinero de las tarjetas black

“Alguna vez le comenté al secretario general la posibilidad de entregar las facturas y el secretario me respondió que no hacía falta”, ha reconocido el exdirectivo. “Me gustaría contestar a todas las acusaciones, pero no lo voy a hacer”. De esta manera se ha presentado José Antonio Moral Santín, consejero propuesto en su día por Izquierda Unida de Madrid en Caja Madrid, en el juicio de las tarjetas black tras rechazar contestar a las acusaciones particulares y personales. En los primeros minutos de su intervención ante el juez, Santín ha asegurado que le dieron la famosa tarjeta como “medio de pago”, nunca como “concepto retributivo”.
 
El exmilitante de IU ha relatado, tal y como ha recogido El País, que estos consejeros no ejecutivos al no contar ni tan siquiera con contrato usaban las tarjetas como “el medio para disponer de esa cantidad que se nos asignaba con carácter anual”. Un día a día en Caja Madrid donde los directivos no tenían “unidades de personal”, no tenían acceso a los departamentos y “toda la información se nos proporcionaba a través del secretario general”.
 
El acusado de las tarjetas black que más gastó (456.000 euros) ha explicado que la tarjeta experimentó “dos o tres subidas” cuando Jaime Terceiro era presidente de Caja Madrid. “De Bankia nunca tuve tarjeta. Y la única tarjeta que tuve de Caja Madrid se canceló en 2011”, ha declarado. Y en ningún momento, según Santín, notó que hubiese “algún cambio respecto a la operativa de la tarjeta a lo largo de los tres periodos con tres presidentes distintos”. Tan sólo, “se pasó de un límite mensual a uno que era mensual y anual”.
 
Las justificaciones a la hora de sacar dinero en efectivo de la tarjeta brillaron por su ausencia, ni tan siquiera surgió la duda al retirar el 80% del importe total de lo que extrajo de una sóla tirada, tal y como se le ha recordado en el jucio. Así lo ha reconocido el propio Santín que ha asegurado que ha aportado “documentación para demostrar que nunca se me pidió información de las tarjetas”. “Alguna vez le comenté al secretario general la posibilidad de entregar las facturas y el secretario me respondió que no hacía falta”, ha reconocido el exdirectivo.