Las dos entidades han pinchado en la segunda fase del examen, que se centra en aspectos cualitativos. Las filiales de Santander y Deutsche Bank en EEUU han suspendido el test de estrés cualitativo realizado por la Fed. Se trata del segundo año consecutivo en el que la filial de la entidad alemana, Deutsche Bank Trust Corporation, y el tercero en el que la de la española, Santander Holdings USA, suspenden estas pruebas.
Las dos entidades superaron la primera fase del test que mide en términos cuantitativos la capacidad de resistencia ante un escenario económico adverso. Sin embargo, han pinchado en la segunda fase del examen, que se centra en aspectos cualitativos como el control de riesgos o la organización societaria de las 31 entidades más grandes en EE.UU.
Según recogen los analistas de Bankinter en un informe, en esta última parte del examen, la Fed ha identificado deficiencias en el funcionamiento interno que están estrechamente relacionadas con la planificación para la generación de capital, la medición y gestión de riesgos.
La Fed reconoce que Santander y Deutsche Bank han avanzado en la mejora de estas debilidades pero todavía no han alcanzado los estándares exigidos por el regulador. Las dos entidades deberán corregir las deficiencias identificadas para que puedan implementar sus planes de retribución al accionista (dividendos y/o planes de recompra de acciones) sin restricciones por parte de la Fed.
Junto a Santander y Deutsche Bank, Morgan Stanley ha recibido un aprobado condicional al detectar la Fed “determinadas debilidades en sus procesos de planificación de capital”, por lo que tendrá que enviar un nuevo plan antes del final del cuarto trimestre. Estas han sido las únicas objeciones a los planes presentados por las principales entidades financieras.
