Un 22,1% de los españoles se encuentra en riesgo de pobreza, tasa que asciende hasta el 44,8% en el caso de los parados. Casi un 15% de los trabajadores españoles está en riesgo de pobreza, la cifra más alta desde el inicio de la crisis, de acuerdo con la Encuesta de Condiciones de Vida de 2015 que ha publicado hoy el Instituto Nacional de Estadística (INE), que aclara que esta tasa no mide pobreza absoluta, sino cuántas personas tienen ingresos bajos en relación al conjunto de la población.
La tasa de riesgo de pobreza se situó en el 22,1% de la población residente en España, un ligero descenso de una décima frente al 22,2% registrado el año anterior, aunque varía mucho según grupos: así, disminuyó en 1,3 puntos entre los menores de 16 años hasta el 28,7%, mientras que subió en 0,9 puntos en los mayores de 65, en la que sin embargo se situó en apenas el 6,3% debido fundamentalmente a que este grupo suele vivir en una vivienda en propiedad.
En relación con la actividad, el 44,8% de los parados estaba en riesgo de pobreza. Por su parte, el 10,3% de los jubilados se encontraba por debajo del umbral de riesgo de pobreza, mientras que en los ocupados, la cifra alcanzó el 14,8%, la más alta desde el inicio de la crisis, y una subida respecto al 14,2% de 2014.
En 2015 el umbral de riesgo de pobreza para los hogares de una persona (calculado con los datos de ingresos de 2014) se situó en 8.011 euros, un 0,6% más que el estimado en el año anterior. En hogares compuestos por dos adultos y dos menores de 14 años, dicho umbral fue de 16.823 euros.
Las cifras publicadas por el INE muestran también que en el momento de realizar la encuesta (primavera de 2015), el 13,7% de los hogares españoles manifiestó llegar a fin de mes con “mucha dificultad”. Este porcentaje era 2,4 puntos menor que el registrado el año anterior.
Por su parte, el 39,4% de los hogares no tenía capacidad para afrontar gastos imprevistos, frente al 42,4% del año 2014, y el 40,6% de los hogares no se podía permitir ir de vacaciones fuera de casa al menos una semana al año. Este porcentaje era 4,4 puntos inferior al registrado en 2014.
El 9,4% de los hogares tenía retrasos en los pagos a la hora de abonar gastos relacionados con la vivienda principal (hipoteca o alquiler, recibos de gas, electricidad, comunidad,…) en los 12 meses anteriores al de la entrevista. Este porcentaje se situaba 0,8 puntos por debajo del registrado el año anterior.
El ingreso medio anual neto por hogar se situó en 26.092 euros, con una disminución del 0,2% respecto al año anterior. Por su parte, el ingreso medio por persona alcanzó los 10.419 euros, cifra un 0,3% superior a la registrada el año precedente. La diferencia de la evolución entre el ingreso por hogar, que disminuye, y el ingreso por persona, que aumenta, se explica por la reducción en el tamaño medio del hogar, explica la agencia estadística.
