El efecto en el déficit público de las ayudas a la banca se situó en 852 millones de euros el pasado 2015. Han pasado tres años desde la última oleada de rescates bancarios, que supuso el desembolso de casi 40.000 millones de euros a través del MEDE, pero las ayudas públicas al sector financiero se siguen dejando notar en las cuentas públicas españolas. En concreto, el pasado 2015 sumaron otros 852 millones al déficit público.
De acuerdo con el ‘Informe sobre el Grado de Cumplimiento del Objetivo de Estabilidad Presupuestaria, y deuda pública y de la Regla de Gasto del Ejercicio 2015’ que ha publicado el Ministerio de Hacienda, las ayudas concedidas en 2015 por la Administración central a las entidades financieras se elevaron hasta 1.352 millones de euros.
No obstante, este dato no se corresponde con el efecto en el déficit público, que se situó finalmente en 852 millones de euros. Según señala el departamento que dirige Cristóbal Montoro, dentro de esta última cifra se “refleja la incidencia neta, en la que también se tienen en cuenta los ingresos aportados por las operaciones realizadas en el marco de la crisis financieras, como son los ingresos por comisiones de avales, intereses, dividendos, etc., por importe de 499 millones”.
En el ejercicio 2015 se registró un déficit en términos de contabilidad nacional de 54.965 millones de euros, incluyendo las ayudas financieras, cifra que representa el 5,08% del PIB, que ha sido estimado por el INE en 1.081.190 millones de euros.
