Forex: espejo y factor de cambio en la economía mundial

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Forex: espejo y factor de cambio en la economía mundial

Los mercados mundiales viven uno de esos momentos en los que sólo una correcta inversión de capitales puede aportar unos réditos monumentales. Los mercados mundiales viven uno de esos momentos en los que sólo una correcta inversión de capitales puede aportar unos réditos monumentales. Cualquier espacio de inversión económica, ya sea el mercado bursátil, el de materias primas o, especialmente, el mercado de divisas, ofrecen oportunidades de grandes beneficios en ciclos económicos como el actual, condicionados por cambios bruscos en el estado de muchos de los productos financieros.

El episodio de la crisis financiera de 2008 no fue sino un avance de lo que los mercados han vivido durante los últimos siete años: inestabilidad e inseguridad. Dos rasgos que durante este último ciclo económico han afectado especialmente a la Unión Europea, que no parece haberse reencontrado con el dulce camino por el que discurría a principios del milenio. Y esto parece que no va a cambiar. Diferentes actores económicos avisan de que los desafíos políticos y financieros a los que se enfrenta el mercado común europeo pueden minar enormemente su fiabilidad e incluso ponerla al borde del colapso. Y atentos al discurrir de la situación, siguen tanto veteranos inversores como recién llegados a la especulación financiera, que buscan anticiparse al siguiente vaivén del mercado europeo que pueda alterar de forma importante, otra vez, el status quo del panorama económico internacional.

Obviamente, dichas variaciones constantes en el rumbo de los mercados no hacen sino beneficiar a los inversores más expertos y con más conocimientos de los movimientos y ciclos económicos. En un mercado donde los cambios sean menores y menos bruscos, las inversiones, aunque serán más seguras, tendrán unos márgenes de beneficio mucho menores. Sin embargo, en un panorama como el actual, el efecto es todo lo contrario: menos seguridad en la apuesta, mayores beneficios.

De entre todos los espacios financieros y especulativos (mercado bursátil, de materias primas o de futuros), es el mercado de divisas o forex en el que se concentran los esfuerzos de la mayoría de estos inversores. Un mercado que mueve más dinero diario que cualquier otro (con sumas de billones de dólares cada 24 horas) y que, básicamente, consiste en un espacio de compra y venta de monedas nacionales. Los inversores que toman parte en él especulan con el valor de cierta divisa frente a otra (las operaciones siempre son entre dos monedas, Euro-Dólar o Dólar-Yen por ejemplo), intentando adelantarse al próximo evento social, político o económico que altere el valor de una de estas divisas. Así, por ejemplo, una buena inversión sería vender 100 dólares cuando éste se paga a 1.10 euros, en previsión de que cierta alteración del estado económico (como, por ejemplo, podría ser el anuncio por parte del Reino Unido de que se plantea salir de la Unión Europea) deprecie la moneda única europea y permita recuperar dichos 100 dólares a un precio menor a los 1.10 euros.

Dichos movimientos en el mercado de divisas se realizan a través de diferentes brókeres online que ofrecen al usuario la posibilidad de entrar a jugar en el mercado bajo cierto tipo de cambio establecido por la propia compañía financiera. A través de ellos, el pequeño inversor puede tomar su pequeña parte de este espacio económico del forex, que pese a ello está controlado por los grandes bancos mundiales de inversión (Bank of America, Citi, Deustche Bank), que dominan un altísimo porcentaje de las operaciones en el mercado de divisas. Esto se debe no solo a las grandes cantidades de dinero que puede mover en este espacio, sino también a la suma importancia que tiene para el devenir de la economía mundial.

Y es que al fin y al cabo, el forex no es sino un espejo comparativo entre el estado de las diferentes economías mundiales y un factor importante en su devenir. De hecho, tal y como anunciaba Goldman Sachs hace unos días, se espera que la cotización del euro caiga por debajo de la del dólar durante este año. Dicha caída, que podría llegar a poner a la unidad de la divisa única europea al nivel de 0´95 dólares, estaría provocada por la obligación del Banco Central Europeo de devaluar la moneda para provocar un aumento de los precios en la Eurozona y crear inflación en el mercado común. Por lo tanto, en la economía actual, la importancia del mercado de divisas es doble. No solo funciona como método de análisis y reflejo de la economía mundial, sino que es en la actualidad el mayor espacio de especulación tanto para grandes inversores como para los más humildes de las finanzas.

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